
Marcelo Ciarrocchi logró la pole en el regreso del TC2000 al Zonda
El cordobés dominó la clasificación en San Juan con el Toyota Corolla, en una jornada marcada por el viento y el entusiasmo del público.
El TC2000 volvió al Autódromo El Zonda-Eduardo Copello de San Juan después de siete años, y lo hizo con una clasificación ajustada y un gran marco de público. Marcelo Ciarrocchi fue el más rápido de la tanda cronometrada al volante del Toyota Corolla del equipo Toyota GAZOO Racing y se anota como candidato a la victoria, pese a que largará séptimo por el sistema de inversión de grilla.
UN REGRESO ESPERADO
El Zonda no recibía a la categoría desde 2019. En esta nueva etapa, el TC2000 presentó en San Juan sus SUV de 500 caballos y efecto suelo, en una fecha que recuperó la conexión con uno de los escenarios más emblemáticos del automovilismo argentino.

El viernes, la actividad comenzó con un breve shakedown y un primer contacto con una pista que se encontraba en buenas condiciones, pese a estar sucia por la falta de actividad. En los entrenamientos del sábado, Franco Vivian fue el más veloz en la primera tanda con la Chevrolet Tracker del Pro Racing, registrando 1:11.460. En el segundo ensayo, Ciarrocchi marcó 1:11.144 y dejó en claro su potencial para la clasificación.
La sesión de entrenamientos no perdonaron imprecisiones. Sebastián Quirno sufrió un fuerte golpe con el VW Nivus del Halcón Motorsport en la práctica libre 1, mientras que Nicolás Traut dañó su Fiat en la segunda. Ambos quedaron fuera de la clasificación, aunque Traut podrá participar en la carrera final.

UNA POLE CON VALOR SIMBÓLICO
Con precisión y consistencia, Ciarrocchi se impuso en la clasificación con un giro de 1:11.284, superando por apenas 82 milésimas al campeón Leonel Pernía (Honda ZR-V) y por 84 milésimas a Vivian. El resultado ratifica la competitividad del nuevo formato técnico del TC2000, donde las diferencias entre los primeros puestos fueron mínimas.
Para Ciarrocchi, la pole tuvo un significado especial. El cordobés volvió a subirse al auto con el que se destacó la pasada temporada y que había quedado a un costado cuando el equipo Toyota decidió que usara este año el Corolla que corrió Matías Rossi. La destrucción de esa unidad durante los 200 Kilómetros de Buenos Aires hizo que la escudería de Darío Ramonda volviera a ponerle en pista el auto con el que Chelo siempre se sintió más cómodo. Y eso lo certificó con esta actuación.

Por el sistema de inversión de grilla, la final del domingo tendrá en la primera fila a Facundo Aldrighetti (Chevrolet Tracker) y Rossi (Toyota Corolla Cross), ganador en Buenos Aires, mientras que Ciarrocchi largará séptimo junto a Franco Morillo (Chevrolet Cruze).
El público sanjuanino acompañó con entusiasmo el regreso del TC2000, completando las laderas de los cerros que rodean la quebrada del Zonda. Fue un reencuentro con la historia, en un escenario donde el automovilismo argentino siempre tuvo una cita especial.