
Christian Horner, director del equipo Red Bull Racing, desmintió categóricamente los rumores que lo vinculaban con una posible llegada a Ferrari en reemplazo de Fred Vasseur. La versión había sido publicada esta semana por el periódico alemán Bild, que aseguraba que la Scudería había iniciado contactos con el británico. En la previa del Gran Premio de España, Horner habló del tema por primera vez de manera oficial y dejó en claro su postura.
“Por supuesto que siempre es halagador que te asocien con otros equipos”, comenzó diciendo en la conferencia de prensa de Montmeló. “Pero mi compromiso, al cien por ciento, es con Red Bull. Siempre lo ha sido y ciertamente lo será a largo plazo”.

Con 50 años y al frente de Red Bull desde su ingreso a la Fórmula 1 en 2005, Horner es actualmente el jefe de equipo con mayor antigüedad en el paddock. Bajo su liderazgo, Red Bull ha conquistado ocho títulos de pilotos -cuatro con Sebastian Vettel y cuatro con Max Verstappen– y seis campeonatos de constructores, convirtiéndose en uno de los equipos más exitosos de la era moderna de la F.1.
UN CICLO CON DESAFÍOS RECIENTES
La declaración de Horner se da en un contexto de cambios significativos en Red Bull Racing. En abril, la escudería anunció la salida de Adrian Newey, su legendario director técnico, quien ya ha sido vinculado a un futuro proyecto con Aston Martin a partir de 2026. A esta baja se sumó la de Jonathan Wheatley, exdirector deportivo, quien asumió recientemente como team principal en Sauber, futura escudería oficial de Audi.
Además, la figura de Horner ha estado bajo escrutinio desde principios de año debido a una investigación interna por denuncias de conducta inapropiada hacia una empleada del equipo. Aunque fue exonerado por Red Bull GmbH, la situación generó tensión interna, con reportes sobre desacuerdos entre el propio Horner y el entorno de Verstappen. Uno de los puntos de fricción más conocidos fue el distanciamiento con Jos Verstappen, padre del tricampeón mundial.

Pese a estos desafíos, Horner conserva una fuerte influencia dentro de la estructura de Red Bull Racing, especialmente tras la salida de figuras clave. Su rol como director de equipo está respaldado por resultados deportivos sólidos y por una estrecha relación con el área de marketing y desarrollo de la marca Red Bull.
¿QUÉ BUSCA FERRARI?
El interés de Ferrari en Horner, reportado por Bild, se enmarca en la búsqueda constante del equipo italiano por volver al primer plano de la Fórmula 1. Aunque la llegada de Lewis Hamilton para la temporada 2025 fue vista como un gran golpe mediático y deportivo, los resultados de esta temporada han estado por debajo de lo esperado. Tras ocho Grandes Premios disputados, Ferrari se ubica cuarta en el campeonato de constructores y aún no ha logrado una victoria.
Vasseur, actual director del equipo, asumió en 2023 tras la salida de Mattia Binotto. Aunque ha mejorado la gestión interna y reforzado la estructura técnica, los resultados siguen siendo irregulares. Esto ha llevado a especulaciones sobre una posible reestructuración más profunda, incluida la figura del team principal.
La hipotética llegada de Horner representaría para Ferrari un intento de incorporar una figura con experiencia comprobada en liderar proyectos ganadores, algo que el equipo italiano no ha logrado desde la salida de Jean Todt y Ross Brawn a mediados de la década del 2000.
LA POSTURA DE HORNER
“Siempre hay un montón de especulaciones en este negocio: que tal persona va aquí, que otra va allá. Pero la gente del equipo sabe exactamente cuál es la situación”, agregó Horner en su declaración, dando a entender que, internamente, su continuidad no está en duda.
El británico mantiene un contrato a largo plazo con Red Bull y, según medios especializados, continúa teniendo el respaldo del núcleo ejecutivo de la empresa matriz en Austria. También estaría involucrado activamente en el proyecto de motorización Red Bull Powertrains, que prepara el ingreso del equipo como fabricante independiente de unidades de potencia a partir de 2026, en alianza con Ford.
UNA DECISIÓN CON PROYECCIÓN ESTRATÉGICA
Más allá de desmentir el rumor, la declaración de Horner busca enviar un mensaje claro tanto dentro del equipo como hacia el resto del paddock: su continuidad al frente del proyecto es parte de una estrategia de largo plazo.
La posibilidad de pasar a Ferrari, aunque atractiva desde lo simbólico, implicaría para Horner dejar atrás una estructura que él mismo construyó desde cero y con la que alcanzó el éxito. Además, en Red Bull cuenta con una autonomía y poder de decisión poco comunes en la F.1 actual, algo que difícilmente encontraría en Maranello, donde las decisiones corporativas suelen estar más centralizadas y sujetas a los vaivenes de la política interna.
Su negativa a Ferrari no solo refuerza su posición dentro del equipo austríaco, sino que también pone en evidencia que, más allá del prestigio, no todo jefe quiere cruzar las puertas de Maranello. En la Fórmula 1, los rumores son parte del juego. Pero cuando un jefe de equipo habla tan claro, es porque tiene razones de peso para quedarse. Y Horner, por ahora, sigue apostando a los toros.