A principios de este año, el mundo de la Fórmula 1 se estremeció con la decisión de Lewis Hamilton, siete veces campeón de la Máxima, de dejar Mercedes para marchase a Ferrari en 2025. Aunque el anuncio conmocionó a muchos, Toto Wolff, jefe del equipo alemán, ya había recibido una advertencia que le permitió anticiparse a la noticia.
Wolff reveló recientemente que fue una llamada de Carlos Sainz Sr. lo que lo puso en alerta sobre la posible salida de Hamilton. Durante una conversación en el podcast High Performance, Wolff compartió cómo Sainz Sr. le dijo que su piloto estaba negociando con Ferrari, donde sustituiría a su propio hijo. Esta pista, junto a otros factores, dio a Wolff el tiempo necesario para prepararse mentalmente antes de que Hamilton activara la cláusula de salida de su contrato en Mercedes.
“Escuché las campanas sonando dos semanas antes”, confesó Wolff. El aviso de Sainz Sr., seguido de llamadas inesperadas de otros padres de pilotos, fue suficiente para que el austriaco empezara a sospechar que algo grande estaba sucediendo. “Mandé un mensaje a (Fred) Vasseur, el jefe de Ferrari, preguntándole si estaba fichando a nuestro piloto, pero no obtuve respuesta. Muy inusual para Fred, que es un buen amigo”, añadió Wolff, describiendo cómo el silencio de Vasseur fue la confirmación final de que Hamilton estaba a punto de marcharse.
A pesar de estar preparado para la noticia, Wolff tenía un plan estratégico para afrontar la conversación final con Hamilton. Sabía que Ferrari había perdido a Simone Resta, uno de sus ingenieros más experimentados, quien se uniría a Mercedes el próximo año como director de desarrollo estratégico. Con esta información en mano, Wolff decidió usarla como un as bajo la manga al recibir a Hamilton.
Cuando Hamilton llegó a su oficina en enero para la reunión en la que comunicaría su decisión, Wolff aprovechó para mencionar su nueva contratación de Ferrari. “Tuvimos una pequeña charla como siempre y le mencioné que ahora teníamos a alguien de Ferrari en nuestro equipo. Entonces, Lewis me dijo ‘hay algo que necesito decirte’. En ese instante supe que estaba pasando de verdad”, relató Wolff. Ese momento marcó el fin de una de las alianzas más exitosas en la historia de la F.1.
Aunque la salida de Hamilton es un golpe para Mercedes, Wolff adoptó una postura tranquila y desapegada gracias a un consejo clave de su amigo Pep Guardiola, entrenador del Manchester City. Según Wolff, Guardiola le enseñó que si un jugador o piloto cree que puede encontrar mejores oportunidades en otro equipo, es preferible dejarlo ir sin intentar retenerlo.
Wolff confesó que, aunque la noticia “no movió la aguja” en su vida debido a problemas mucho mayores que ha enfrentado, este consejo de Guardiola le dio claridad. “Pep me dijo que si alguien piensa que puede jugar mejor en otro lugar o ganar más, simplemente tienes que dejarlo ir”, explicó Wolff. Para él, la lección fue clara: Hamilton estaba decidido a unirse a Ferrari y Mercedes debía aceptar la transición con madurez y sin resentimientos.
La partida de Hamilton representa no solo el fin de una era, sino también una nueva etapa para Mercedes, que apuesta por una alineación renovada con George Russell como piloto principal y el joven Andrea Kimi Antonelli como sustituto de Hamilton para recuperar su posición en la Fórmula 1.