“Un hombre manso considerado por muchos como el Leonardo da Vinci de los superdeportitos”, define el diario italiano La Stampa al argentino Horacio Pagani, fundador de Pagani Automobili y quien hace unas horas presentó en sociedad el Pagani Utopia.
Este superdeportivo es el tercer modelo de la compañía con sede en San Cesario sul Panaro, un municipio de la provincia de Módena. El Utopia sucede al Pagani Zonda (1999) y al Pagani Huayra (2011), modelos de los que Pagani se cansó de hacer series especiales que ayudaron a acrecentar su fama.
El Zonda fue, sin dudas, su carta de presentación en el mundillo de los súper autos. Esta máquina surgió a fines de los ’80, mientras le rondaba en la cabeza la idea de independizarse definitivamente de Lamborghini (comenzó a trabajar allí en 1987, cuatro años después de llegar a Italia).
El diseñador nacido en Casilda, Santa Fe, bautizó como Proyecto C8 al que sería el primer modelo de su empresa, fundada en 1992. Aunque para el nombre comercial tenía otros planes…
Pagani sintió que su primer auto debía ser un homenaje a aquella persona que le había permitido llegar a Italia para cumplir con su sueño de la infancia. Así fue que el Proyecto C8 se transformó en Fangio F1, todo un tributo a su amigo y mentor Juan Manuel Fangio.
“Fue un buenísimo amigo. Tenía 21 años cuando lo conocí a través de las carreras… Cuando decidí venir a Europa para hacer mi auto, él hizo una carta de recomendación para Enzo Ferrari, Lamborghini, De Tomasso… y así fue como llegué a Lamborghini, donde empecé como obrero de tercer nivel. Se creó entre nosotros una relación muy linda”, recordó en una entrevista que le realizaron hace unos años.
El Pagani Fangio F1 iba a ver la luz antes del final del Siglo XX. Su construcción comenzó en 1992 y al año siguiente fue probado en el túnel de viento de Dallara con resultados positivos.
Sin embargo, tras la muerte del Chueco en 1995, el diseñador prefirió -por respeto- no ponerle el apellido del Quíntuple a su primer vehículo. Así fue que el modelo dejó de llamarse Fangio F1 y pasó a ser conocido como Zonda C12.
El Pagani Zonda, que se presentó al público en el Salón del Automóvil de Ginebra de 1999, se convirtió rápidamente en una sensación por su singular diseño y por sus prestaciones favorecidas por el uso de materiales compuestos -que le otorgaban un bajo peso- y por contar con un poderoso motor Mercedes-Benz.
Pese al éxito del Zonda, Pagani jamás abandonó la idea de rendirle tributo a su amigo. En 2005, diez años después del fallecimiento del balcarceño, le dedicó el Pagani Zonda F (por Fangio), una de las series limitadas de su famoso deportivo del que solo se fabricaron 25 ejemplares.