
Una vez finalizada la actividad del viernes del Gran Premio de Canadá de Fórmula 1, Franco Colapinto habló sin rodeos de lo ocurrido en el circuito Gilles Villeneuve de Montreal. El piloto argentino, que afronta su cuarta carrera con el equipo Alpine, reconoció las dificultades vividas en el primer día de actividad de la prueba canadiense, pero también dejó la puerta abierta a una mejora significativa si la escudería gala logra dar en la tecla con la puesta a punto.
“Hoy no fue el día más fácil de entrenamientos“, resumió con sinceridad Colapinto al cerrar su jornada. “En general estuve luchando mucho en las curvas de baja velocidad. El auto no se siente tan conectado como nos gustaría y todavía estoy teniendo problemas con el balance”, explicó, dejando claro que, más allá de los resultados en la tabla, el principal inconveniente radica en la falta de confianza con el comportamiento del A525.
TROMPOS, FALTA DE RITMO Y UN AUTO DIFÍCIL DE LEER

Durante las dos sesiones del viernes, Franco cometió un trompo en cada una. En la primera práctica quedó 19°, con un tiempo de 1:14.645, a casi 0.83 segundos de su compañero Pierre Gasly. En la segunda, mejoró su tiempo a 1:13.898, pero finalizó 18°, a más de un segundo del francés. Si bien el resultado parece un retroceso respecto a España, donde logró una buena evolución entre viernes y sábado, Colapinto sostiene que el trabajo del equipo puede revertir la situación.
“Cuando intento ir al límite, el auto no se queda ahí ni me da la confianza que necesito“, admitió el argentino. En un circuito como el de Montreal, donde los márgenes son mínimos y los muros están muy cerca, esa sensación se traduce en errores, pérdida de tiempo y frustración. Sin embargo, no todo fue negativo.
Franco Colapinto complicado en el GP de Canadá: dos trompos y lejos de Pierre Gasly
UN DATO ALENTADOR: EL RITMO CON TANQUE LLENO
Entre las sombras del viernes apareció una luz de esperanza. “El stint largo con combustible alto fue mucho más positivo y el auto se sintió mucho mejor. Tenemos que entender por qué ocurre eso y trasladarlo también al ritmo con poca carga de combustible”, explicó Colapinto.
Ese comentario es clave: suele ser en las simulaciones de carrera donde los equipos evalúan el comportamiento real del auto bajo condiciones de desgaste y consistencia. Si el Alpine funcionó mejor en ese contexto, podría ser una señal de que el setup base tiene potencial, pero requiere ajustes específicos para extraer el máximo en vuelta lanzada.
CONFIANZA EN EL PROCESO Y EN EL EQUIPO
A pesar del resultado negativo en la hoja de tiempos y los errores cometidos, Franco se mostró optimista respecto al sábado: “Creo que hay potencial suficiente como para hacer un buen trabajo mañana y poner todo junto“, afirmó. “Dimos vuelta el fin de semana en España de un día para el otro con los cambios que hicimos, así que claramente hay margen para mejorar.”
El sábado será una jornada decisiva, no solo en términos de resultados, sino también para reforzar la confianza de Colapinto en su adaptación al indócil Alpine. La sesión de clasificación pondrá a prueba su capacidad de absorber información, corregir errores y plasmarlo todo en una vuelta rápida, en un circuito donde el margen de error es mínimo.
Si logra revertir la tendencia del viernes será una nueva muestra de su crecimiento como piloto dentro de un equipo que necesita estabilidad en medio de una temporada turbulenta.