
A horas para que finalice el Rally Dakar 2025 ya se mira de reojo la próxima edición, que nuevamente se realizará en Arabia Saudita. La gran novedad de la 48ª versión de la mítica prueba será la llegada de la categoría Stock que promete darle un nuevo impulso al tratarse de vehículos de serie preparados para competir, como lo era la antigua T2. Quien ya se ha comprometido a participar de este desafío es Defender, marca británica que pertenece al grupo JLR (ex Jaguar Land Rover).
A fines del año pasado, Defender anunció que se sumaba al Dakar como patrocinador oficial. Ese fue el prólogo de un plan mayor: participar con un equipo oficial en la exigente competencia en la flamante división para autos de producción.

El compromiso con el Dakar es total al punto que su programa se extenderá hasta 2028 y no solo correrá en esta aventura que se desarrolla en el desierto saudí sino que también estará presente en el Campeonato del Mundo de Rally Raid (W2RC).
Defender inscribirá dos vehículos en las cinco rondas del W2RC y tres vehículos en el Dakar. Aunque los nombres de los pilotos no fueron confirmados, ha trascendido el interés de la marca por contar con el francés Stéphane Peterhansel, el máximo ganador de la carrera con 14 conquistas, y el noruego Petter Solberg, que debutaría en la especialidad y que este año se lo ha visto merodeando por los campamentos. El nórdico seguirá así el camino del español Carlos Sainz y el francés Sébastien Loeb, que tras consagrarse en el WRC han continuado con sus campañas en el rally-raid.

La marca británica utilizará un vehículo basado en la arquitectura D7x (x = extremo), especialmente desarrollada para ofrecer una rigidez excepcional ya que es tres veces más fuerte que los chasis tradicionales de los vehículos de rally. El desarrollo estará a cargo de Prodrive, toda una garantía de eficacia y competitividad.
La categoría Stock es uno de los cambios más interesantes en el reglamento del Dakar a partir de 2026. En los últimos años, la presencia de UTV y los vehículos T1+ ha eclipsado la participación de modelos de producción más accesibles.
Con la nueva regulación, se espera un regreso de los coches de serie modificados, lo que añadirá un componente más accesible y, en muchos casos, emocionante para los aficionados al rally.
Defender no estará solo en esta división, ya que se esperan proyectos similares de otras marcas como Ford y Toyota, quienes también buscarán aprovechar el nuevo enfoque para demostrar la capacidad de sus productos.