
En la industria automotriz, hay nombres que evocan pura adrenalina. Alpine es uno de ellos. Y cuando una marca con semejante linaje anuncia un nuevo modelo que toma inspiración directa del mundo de la resistencia y lo traslada a la calle, es inevitable prestar atención. Así nace el Alpine A390, un sport fastback 100% eléctrico que busca redefinir el equilibrio entre elegancia, alto rendimiento y tecnología.
La marca francesa ha confirmado que el A390 será develado el próximo 27 de mayo en Dieppe, cuna histórica de Alpine, apenas días antes del inicio de las celebraciones por su 70° aniversario. La expectativa es alta: el modelo representa el segundo integrante del “Dream Garage” de vehículos eléctricos con sello Alpine.
CON EL ADN DEL A390_Β Y LA ESENCIA DEL WEC
El diseño del nuevo A390 impacta desde el primer vistazo. Su carrocería sport fastback -inusual dentro del segmento eléctrico- mantiene un 85% del diseño conceptual del A390_β show car, que fue presentado en el Salón del Automóvil de París en 2024. Esta continuidad estética no es caprichosa: responde a una estrategia de diseño pensada para consolidar una identidad visual fuerte dentro de la nueva era de Alpine.
Uno de los elementos más distintivos es su firma luminosa, que toma referencias tanto del futurista prototipo Alpenglow como del hypercar A424 que actualmente compite en el Campeonato Mundial de Resistencia (WEC). Así, el A390 no solo se presenta como un automóvil deportivo de calle, sino como un vehículo que respira competición desde sus líneas hasta su tecnología.
TRES MOTORES ELÉCTRICOS Y TORQUE VECTORING

Aunque Alpine aún no ha revelado todos los datos técnicos, se sabe que el A390 estará impulsado por tres motores eléctricos, gestionados por un sistema de Torque Vectoring activo que optimiza la entrega de potencia en curvas. A esto se suman cinco modos de conducción que permitirán adaptar el carácter del vehículo al deseo del conductor: desde la eficiencia total hasta la deportividad sin filtros.
Este enfoque recuerda a la filosofía que hizo grande a la marca en los tramos del Rally de Montecarlo o en los circuitos de Le Mans: coches livianos, precisos y reactivos, ahora reinterpretados para la era eléctrica.
UN INTERIOR QUE MEZCLA LUJO, DATOS Y EMOCIÓN
La frase “racing car in a suit” cobra sentido pleno al ingresar al habitáculo del A390. El interior ha sido concebido como una cabina premium para cinco ocupantes, con materiales de alto nivel como aluminio cepillado, fibra de carbono expuesta y cuero auténtico.
El sistema Alpine Telemetrics llega en una nueva evolución, con visualizaciones gráficas pensadas para quienes no solo quieren conducir, sino también entender qué ocurre bajo la piel del auto: fuerzas G, temperaturas, tiempos por vuelta e incluso métricas de estilo de conducción, todo al alcance de la vista.
El toque más refinado lo pone Devialet, la firma francesa de ingeniería acústica de vanguardia, que desarrolló un sistema de audio de 13 altavoces con tecnología exclusiva para el A390. Una experiencia sonora envolvente que busca replicar la misma precisión con la que un motor V6 de carreras encuentra su punto de par máximo.
EXCLUSIVIDAD DESDE EL INICIO: LA ALPINE A390 PREMIÈRE PASS
Como parte de su estrategia de lanzamiento, Alpine ofrece una experiencia única para sus primeros compradores. A través del programa Alpine A390 Première pass, los entusiastas que se registren con anticipación podrán acceder al vehículo dos semanas antes de la apertura oficial de pedidos. Además, recibirán como obsequio un par de auriculares Devialet Gemini II x Alpine de edición limitada, para que la experiencia sonora trascienda al habitáculo.
Esta movida no solo refuerza la exclusividad del A390, sino que propone un vínculo emocional entre conductor y marca desde el primer día.
DISEÑADO Y CONSTRUIDO EN EUROPA, CON ESPÍRITU DE PISTA
El Alpine A390 no es un producto global genérico. Ha sido desarrollado y construido íntegramente en Europa, respetando las raíces de la marca y aprovechando el conocimiento adquirido en décadas de competición. Cada línea, cada tecnología incorporada, responde a un manifiesto claro: ofrecer un automóvil eléctrico que no se limite a ser eficiente, sino que emocione.
Alpine, que desde su refundación bajo el ala de Renault ha ido ganando protagonismo con modelos como el A110 y su presencia en la Fórmula 1, apuesta fuerte con este modelo que no busca competir con los grandes SUV eléctricos, sino crear su propio camino en un segmento todavía incipiente: el de los fastback eléctricos deportivos.
El Alpine A390 no es un auto más. Es el punto de encuentro entre la herencia deportiva, el diseño de vanguardia y la electrificación inteligente. Un coche que promete acelerar emociones tanto como revoluciones eléctricas. En la antesala de su 70° aniversario, Alpine se juega mucho más que un lanzamiento: se juega el futuro de su legado. Y lo hace, como siempre, con elegancia, pasión y un toque irreverente.