La trepada de Pikes Peak (Pikes Peak Hill Climb) es una de las carreras con más historia de Estados Unidos y del mundo entero. No en vano, se ha celebrado desde 1916, lo que la convierte en una de las competiciones automovilísticas más antiguas que todavía se disputan en la actualidad, a la altura de las 500 Millas de Indianápolis (1911), el Rally de Montecarlo (1911), las 24 Horas de Le Mans (1923) o el Gran Premio de Mónaco (1929).
Con 108 años de historia, en Pikes Peak han competido algunos de los mejores pilotos de rally del mundo y también todo tipo de vehículos (incluidos camiones o sidecars) que han recorrido los 19,99 kilómetros y 156 curvas hasta la cima situada a 4.303 metros de altitud.
Desde los 20 minutos y 55 segundos del primer récord hasta los 7m57s148 actuales, la montaña ha sido testigo de una espectacular evolución tanto del propio recorrido (ahora de asfalto y antes de tierra) como del mundo del motor. Aquí se forjaron leyendas como la de Bobby Unser, el piloto con más victorias en la carrera (10); de Michèle Mouton, única mujer en alzarse con el triunfo absoluto; o de Romain Dumas, el piloto más rápido de la historia.
EN HONOR A ZEBULON PIKE
Pikes Peak no quiere decir otra cosa que Pico Pikes o Monte Pikes. Situado en la cordillera Front, en el centro del estado de Colorado, es aquí donde se celebra la mítica trepada. La montaña lleva el apellido de Zebulon Pike, un explorador y general de brigada que tenía como misión explorar las Grandes Llanuras, una amplia meseta americana.
Al ver la majestuosa cima de la montaña que hoy conocemos como Pikes Peak, el explorador trató junto a su expedición escalarla en 1906, en un intento que resultaría fallido. Posteriormente, habría dicho que el hombre nunca podría llegar a la cima, situada a 4.303 metros.
Pike denominó la montaña como Grand Peak, pero más tarde pasaría a conocerse como Pikes Peak, en su honor. Como sucede con muchas leyendas históricas, no está claro si realmente fue esta la montaña que Zebulon Pike trató de escalar, pero aun así, su apellido, permanecerá por siempre unido a este icónico lugar.
Pikes Peak fue escalada por primera vez en 1820 en una expedición liderada por el botánico y geólogo Edwin James. Apenas cien años después, Pikes Peak se había convertido en una carrera de coches, algo en lo que jugó un papel crucial Spencer Penrose, uno de los principales empresarios y mecenas de la ciudad de Colorado Springs, situada a 50 kilómetros de la montaña.
Penrose se dio cuenta del potencial turístico de la zona y convirtió el estrecho camino de carruajes situado en Pikes Peak en una carretera hasta la cima, que fue inaugurada a principios de agosto de 1916. Solo unos días después, entre los días 10 y 12 del mismo mes, se organizó la primera edición de la Pikes Peak Hill Climb.
En 1918, Penrose hizo realidad otro de sus proyectos, el Hotel Broadmoor, para alojar a los turistas que visitaran la zona y decidieran ver la carrera. En la actualidad, no solo Pikes Peak sigue celebrándose, sino que este hotel es uno de los más importantes de toda América… ¡y, además, patrocina a la propia subida de montaña!
EL INICIO DE UNA CARRERA LEGENDARIA
El piloto Rea Lentz, natural de Seattle, se alzó con la primera victoria de la trepada, conocida en el primer momento como Penrose Trophy, al volante de un Romano Special. Lentz Completó el ascenso en 20:55.60, superando por 45 segundos al segundo clasificado, Ralph Mulford.
En aquella edición también se otorgó el trofeo a la mejor motocicleta, pilotada por Floyd Clymer, que realizó el recorrido en 21:58.41. En la categoría Sidecar, se impuso Doc Van Vanderhoof, con un tiempo de 29:33.00.
En Pikes Peak se ha visto competir a todo tipo de vehículos, empezando por los vehículos monoplaza de principios de 1900, para continuar con motos, sidecars, quads… También llegarían los sorprendentes camiones, con categoría propia en 1970, los modelos de producción más reconocibles por los aficionados, los prototipos especialmente preparados para la competición…
En la actualidad, la carrera se divide en distintas divisiones, todas ellas de vehículos de cuatro ruedas: Unlimited (los más visuales y rápidos), Time Attack 1 (coches de producción modificados), Pikes Peak GT4 Trophy (vehículos GT4), Open Wheel (monoplazas y buggies), Pikes Peak Open (coches de serie ampliamente modificados) y Exhibition (prototipos o modelos preproducción que también pueden entrar en otras clases). La categoría de motos ya no forma parte de la carrera, pues fue suspendida tras la muerte del piloto Carlin Dunne en la edición de 2019.
La primera participación de un coche eléctrico en Pikes Peak data de 1981, cuando fue inscrito en Pikes Peak el vehículo experimental Sears XDH-1, un modelo creado por la empresa Globe Union para promocionar las baterías Sears DieHard en el décimo aniversario de la compañía.
El chasis de un Fiat 128 Berlinetta de 1977 fue equipado con 20 baterías DieHard y un motor eléctrico. Gracias a ello, alcanzaba una velocidad punta 110 km/h con una autonomía de alrededor de 90 kilómetros. El piloto a los mandos, Joe Ball, completó la carrera en 32 minutos y 7 segundos.
En 1994 se introdujo la clase de vehículos eléctricos en Pikes Peak, y el registro del primer eléctrico bajó considerablemente, hasta 15 minutos y 44 segundos.
DE LA TIERRA AL ASFALTO
La Carrera hacia las Nubes se ha disputado sobre tierra durante gran parte de su historia, pero esto ya no es así, puesto que la carretera que sube hasta la cima ha sido asfaltada. Si bien para muchos fue un sacrilegio, la organización no tuvo alternativa, después de que la ciudad de Colorado Springs perdiera un juicio ante la organización medioambiental Sierra Club, que la demandó por los daños causados por la erosión de arroyos, embalses y vegetación debido al millón y medio de toneladas de grava que se depositaban para la disputa de la prueba.
El asfaltado de la carretera comenzó en el 2002 y fue progresivo, un 10% cada año, hasta ser completado para la edición de 2012, por lo que la de 2011 fue la última disputada con secciones en tierra. El vencedor fue un histórico como Nobuhiro Tajima, con un tiempo de 9:51.278, superando por primera vez la barrera de los diez minutos.
Mientras que Tajima fue el último piloto en lograr el récord en Pikes Peak con tramos de tierra, el neozelandés Rhys Millen inauguró una nueva etapa para la legendaria carrera de Colorado al alzarse con la victoria en la primera edición totalmente asfaltada del recorrido.
Millen completó la subida en un tiempo de 9:46.164, al volante del Hyundai Genesis Coupé, brindando a la marca su primer triunfo absoluto. Hyundai había competido regularmente en Pikes Peak desde 1992, logrando varias victorias en su categoría desde su debut, en la que Rod Millen (padre de Rhys) ganó la división Showroom Stock de dos ruedas motrices.
El poseedor del actual récord de Pikes Peak es el piloto francés Romain Dumas, que en 2018 se alzó con una histórica victoria al volante de un vehículo totalmente eléctrico específicamente desarrollado para esta competición. El tiempo que logró el experimentado piloto de rallies y circuitos fue de 7:57.148, bajando por primera vez de los ocho minutos y batiendo la marca previa de Sébastien Loeb.
El piloto con más victorias en Pikes Peak es Bobby Unser, con 10; le sigue con nueve su sobrino, Louis Unser; y con siete Glen Schultz y Tajima. En la lista de ilustres vencedores, además de Dumas y Loeb, también están Mario Andretti, Walter Röhrl, Ari Vatanen o Michèle Mouton, única mujer en conquistar la victoria absoluta.