
El rugido del V8 vuelve a ser protagonista en Maranello. Ferrari, fiel a su linaje de coupés deportivos, presentó oficialmente el nuevo Ferrari Amalfi, el modelo que toma la posta del Roma y redefine el concepto de Gran Turismo para la era moderna. Una máquina que combina deportividad sin concesiones, tecnología de última generación y esa elegancia atemporal que convierte cada vehículo de la marca italiana en un objeto de deseo global.
UN V8 QUE LATE COMO EL MEDITERRÁNEO
Bajo su largo y esculpido capó delantero se esconde la joya de la corona: un motor V8 biturbo de 3.9 litros derivado de la laureada familia F154. Con 640 CV de potencia y un par motor moldeado para ofrecer un empuje constante, el Amalfi alcanza los 100 km/h en apenas 3,3 segundos y los 200 km/h en 9,0, cifras que lo sitúan como uno de los coupés 2+ más rápidos y refinados del mercado.
No se trata solo de números. La melodía mecánica, cuidada hasta en los detalles acústicos gracias a un nuevo sistema de escape con control activo y colectores de igual longitud, asegura que cada aceleración sea un espectáculo para los sentidos. Un sonido trabajado para cumplir normativas pero sin traicionar el ADN Ferrari.
DISEÑO: TRADICIÓN Y VANGUARDIA EN EQUILIBRIO
El Ferrari Styling Centre, bajo la dirección de Flavio Manzoni, se inspiró en las curvas de la Costa Amalfitana para crear una silueta fluida y minimalista, que combina sensualidad italiana y agresividad deportiva. El frontal prescinde de la clásica parrilla, sustituyéndola por un ala flotante en color carrocería que realza su anchura y elegancia.
En la zaga, el spoiler activo integrado y los delgados faros ocultos en líneas geométricas remiten a los grandes clásicos de la marca, mientras que el difusor funcional y los detalles en fibra de carbono completan el lenguaje visual de un deportivo que destila sofisticación. Todo ello rematado en un impactante color de lanzamiento, el Verde Costiera, un verde marino que homenajea los destellos del Mediterráneo italiano.
INTERIOR: LUJO Y TECNOLOGÍA AL SERVICIO DEL CONDUCTOR
Dentro, el Amalfi es tan radical como refinado. Su habitáculo adopta el diseño dual-cockpit, que envuelve al conductor y acompañante en dos cápsulas visuales diferenciadas, unidas por el tablero y la consola central de aluminio mecanizado. El volante regresa a los botones físicos, incluido el icónico botón de encendido en aluminio, y el sistema HMI se apoya en tres pantallas digitales que centralizan toda la información y conectividad.
El sistema multimedia es compatible de serie con Apple CarPlay y Android Auto, e integra cargador inalámbrico. Para los melómanos, el opcional Burmester Premium Audio ofrece 14 altavoces y 1.200 W de potencia, logrando una experiencia sonora de primer nivel.
La configuración 2+ permite el uso práctico de las plazas traseras, ideales para viajes cortos o para ampliar el volumen de carga, aportando al Amalfi esa versatilidad que muchos clientes valoran en un Gran Turismo moderno.
AERODINÁMICA ACTIVA: PRECISIÓN AL MILÍMETRO
El trabajo aerodinámico es fruto de un desarrollo conjunto entre los equipos de dinámica y diseño. Destaca el alerón trasero móvil con tres posiciones —Low Drag, Medium Downforce y High Downforce— que adapta la carga aerodinámica según la velocidad y las condiciones de conducción. A 250 km/h, el Amalfi genera hasta 110 kg de carga extra en modo HD, con un incremento de apenas un 4% en la resistencia al avance.
Elementos como los vortex generators, el fondo plano esculpido y los difusores delanteros y traseros, completan un paquete que no solo maximiza las prestaciones, sino que también mantiene la elegancia de las líneas puras del vehículo.
DINÁMICA: LA PRECISIÓN DE LA FÓRMULA 1 EN UN GT
El Amalfi incorpora las últimas tecnologías de Maranello en dinámica vehicular. El sistema brake-by-wire mejora la modulación y respuesta del pedal, mientras que el ABS Evo, ya visto en modelos como el 296 GTB, optimiza el frenado en todo tipo de superficies. A ello se suma un recalibrado de la dirección eléctrica y el sistema SSC 6.1, que gestiona en tiempo real el comportamiento dinámico, el control de tracción y el balance de la carrocería.
En situaciones de alta exigencia, como frenadas a fondo o curvas rápidas, el alerón trasero y el control del chasis trabajan en conjunto para garantizar máxima estabilidad y disfrute al volante.
En términos de seguridad, el Amalfi ofrece un completo paquete de asistentes de conducción (ADAS), que incluye control crucero adaptativo, frenado autónomo de emergencia, alerta de punto ciego y mantenimiento de carril, entre otros. Además, el sistema MyFerrari Connect permite monitorear el estado del vehículo desde una app móvil, reforzando la experiencia premium y el control total del auto.
LA NUEVA JOYA ITALIANA PARA QUIENES LO QUIEREN TODO
El Ferrari Amalfi llega como respuesta a una demanda clara: un coupé con alma de pura sangre, capaz de ofrecer placer de conducción extremo, diseño escultural, confort y usabilidad real. Una máquina que no renuncia a nada y que, como la región que le da nombre, invita a recorrer el mundo con estilo, pasión y el inconfundible rugido de Maranello.