La octava generación del VW Golf ya tiene su versión más potente, la R, que llegó al mercado europeo con 320 CV y 420 Nm de par, lo que supone 75 CV más que el emblemático GTI de última generación.
El nuevo VW Golf R reina por encima de todos los demás como la versión del compacto de serie más potente hasta la fecha. Gracias a su tecnología de propulsión es superior a cualquier otro vehículo lanzado hasta el momento bajo la etiqueta Golf.
Con el motor naftero turboalmimentado 2.0 acoplado a una caja automática DSG de siete relaciones, el Golf R acelera de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y alcanza una velocidad limitada electrónicamente de 250 km/h. No obstante, puede encargarse con un paquete R-Performance opcional, que permite incrementar la velocidad punta hasta los 270 km/h.
Un nuevo sistema de tracción total y el chasis de alta tecnología se fusionan para crear un gran número de innovaciones, que ofrecen la máxima agilidad y placer de conducción. El sistema 4MOTION con Reparto del Par R-Performance constituye el nuevo centro de control, que distribuye la potencia del propulsor entre las cuatro ruedas motrices.
Una nueva transmisión final trasera distribuye la potencia motriz del motor naftero turboalimentado del Golf R no solo entre los ejes delantero y trasero, sino también, de forma variable, entre las dos ruedas traseras. Esto permite incrementar de forma significativa la agilidad del coche, especialmente en las curvas.
Por primera vez en el mundo, la tracción total también está interconectada, a través del Gestor de Dinámica de Marcha, con otros sistemas del chasis, como el bloqueo electrónico de diferencial (XDS) y el control de chasis adaptativo DCC. Gracias a la estrecha integración de estos sistemas, el nuevo Golf R ofrece características de tracción óptimas y un manejo neutral, con el máximo nivel de precisión.
Este modelo ha sido puesto a punto en la mítica variante larga del circuito de Nürburgring lo que ha sido aprovechado por los ingenieros de la marca para incluirle un modo de conducción dedicado a este trazado y al que ha puesto el nombre de Especial.
El “rey de los Golf”, como le define la marca, ha sido 19 segundos más rápido por vuelta en el Nordschleife que su predecesor, el Volkswagen Golf R de 300 CV.