Porsche ha pedido a sus cerca de 1.300 proveedores que utilicen exclusivamente energía renovable en la fabricación de los componentes para sus vehículos a partir de este mes de julio. Esta acción se enmarca en el esfuerzo que está haciendo por reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) de su cadena de suministro.
Esto se aplicará a todos los contratos que se adjudiquen para el suministro de material de producción destinado a nuevos proyectos de vehículos. Los proveedores que no estén dispuestos a cambiar a energía verde certificada ya no serán considerados de cara a contratos a largo plazo con Porsche.
“Nuestros proveedores de celdas de batería ya están usando energía verde desde 2020. Ahora estamos dando el siguiente paso importante: hemos estipulado que el resto de proveedores también empleen solo energía renovable para producir los componentes que nos entregan y así ayudar a reducir aún más las emisiones de CO2”, explicó Uwe-Karsten Städter, responsable de Compras de Porsche,.
La empresa se ha marcado el objetivo de ser neutral en CO2 en toda la cadena de valor para 2030. En la actualidad, su cadena de suministro es responsable de un 20% de todas las emisiones de Porsche.
“Al utilizar solo fuentes de energía renovables, los proveedores siguen nuestro ejemplo en el esfuerzo por alcanzar la neutralidad en carbono. Tenemos previsto mantener conversaciones aún más intensas con nuestros socios para impulsar mejoras en sostenibilidad”, añadió Städter.