El próximo año, el neerlandés Max Verstappen podría convertirse en el quinto piloto de Fórmula 1 en ganar cuatro mundiales consecutivos, aunque la pregunta que resuena es si Red Bull podrá mantener su dominio del 2023.
La incertidumbre reina antes de que los nuevos autos sean puestos a prueba en los ensayos de pretemporada a principios de marzo. Desde los rivales del team austríaco hasta Liberty Media y millones de fanáticos anhelan una batalla más reñida por el podio en el próximo campeonato.
Todos pretenden un pelotón más cerrado y las esperanzas de lograrlo están depositadas en Ferrari, Mercedes, McLaren y Aston Martin, equipos que a lo largo del último certamen demostraron sus intenciones de destronar a Red Bull, aunque no pudieron con el dominio de la escudería regenteada por Christian Horner.
Con 19 victorias en 22 carreras en 2023, Verstappen se destacó de sus colegas con números asombrosos. Su tasa de victorias del 86.3% superó a la del italiano Alberto Ascari, quien en 1952 tuvo un porcentaje de éxito de 85,7%. La temporada 2024, con 24 carreras, presentará nuevos retos, incluyendo seis sprints en Miami y Shanghai.
Si Verstappen y Red Bull siguen por la senda del éxito, Mad Max podría unirse a un selecto grupo: el de pilotos que lograron cuatro coronas en la F.1 de manera consecutiva.
El primero en conseguirlo fue el argentino Juan Manuel Fangio. Tras su primer título en 1951, el Chueco también fue invencible en 1954, 1955, 1956 y 1957. Su impresionante récord fue recién igualado por el alemán Michael Schumacher en el Siglo XXI.
Después de los títulos de 1994 y 1995, Schumi se coronó en 2000, 2001, 2002, 2003 y 2004. Esa seguidilla de cinco cetros le permite al alemán ser el único con tantos campeonatos seguidos.
Los otros dos pilotos que también ganaron cuatro torneos consecutivos son el germano Sebastian Vettel, monarca en 2010, 2011, 2012 y 2013; y el inglés Lewis Hamilton, que a las estrellas de 2008, 2014 y 2015 les sumó las de 2017, 2018, 2019 y 2020.
