
Cadillac ultima los detalles para concretar su desembarco en la Fórmula 1 como el undécimo equipo de la grilla, con la mirada puesta en la temporada 2026. Respaldada por General Motors y con el apoyo financiero del fondo TWG Global, la marca estadounidense avanza en la formación de su estructura técnica, deportiva y logística con el objetivo de estar en condiciones de competir desde el primer año.
La aprobación oficial de la Federación Internacional del Automóvil llegó en marzo de 2024, tras un extenso proceso de evaluación que duró 764 días. Desde entonces, los trabajos se aceleraron, aunque el proyecto ya venía gestándose desde hace tiempo, de manera silenciosa, en diferentes puntos estratégicos de Estados Unidos y Europa.
RECURSOS Y ESTRUCTURA GLOBAL
Cadillac contará con una estructura operativa distribuida en dos continentes. En Europa, el equipo tiene su base de diseño y logística en Silverstone, Reino Unido, uno de los epicentros tradicionales de la Fórmula 1. En Estados Unidos, está en marcha la construcción de la sede principal en Indianápolis, mientras que las instalaciones de fabricación se ubican en Carolina del Norte y Michigan.
El objetivo es contar con un plantel de 600 personas para el inicio de la temporada 2026. Según confirmó Graeme Lowdon, CEO del equipo, actualmente ya alcanzaron dos tercios de ese número, con la incorporación de personal proveniente de otros equipos de Fórmula 1.
Además, el equipo cuenta con el respaldo económico de TWG Global, liderado por Mark Walter, empresario estadounidense cuya fortuna asciende a 12.500 millones de dólares, según el Bloomberg Billionaires Index.
PREPARATIVOS TÉCNICOS Y LOGÍSTICOS
A pesar de haber recibido la aprobación oficial en marzo, Cadillac comenzó los trabajos técnicos mucho antes para ganar tiempo en un proceso extremadamente competitivo. Desde mediados de 2023 se realizan ensayos en túneles de viento y trabajos de simulación.
En enero de 2024 se completó la fabricación del primer piso del monoplaza y en mayo se realizaron pruebas de resistencia del aro antivuelco, cumpliendo con los protocolos de seguridad exigidos por la FIA. También se fabricaron cerca de 10.000 componentes y se emitieron unos 6.000 planos de diseño.
Uno de los aspectos más relevantes es que el equipo utilizará motores Ferrari en su primera etapa, al igual que lo hace actualmente el equipo Haas. Sin embargo, la proyección a mediano plazo es desarrollar su propia unidad de potencia, lo que posicionaría a Cadillac como fabricante completo dentro de la categoría.
ENFOQUE ORGANIZATIVO INSPIRADO EN EL PROGRAMA ESPACIAL
Lowdon, quien tiene experiencia previa en la dirección de equipos como Virgin y Marussia en la Fórmula 1, explicó que el proyecto de Cadillac adoptó un enfoque organizativo inspirado en la estructura utilizada por la NASA en los programas espaciales de los años 60 y 70, particularmente el proyecto Apolo.
Este modelo se basa en una estructura de gestión “plana” que permite una comunicación ágil y directa entre los equipos técnicos ubicados en distintas partes del mundo, como Silverstone, Charlotte y Warren. “Necesitamos que un ingeniero en Reino Unido pueda comunicarse de forma efectiva con otro en Estados Unidos sin intermediarios que ralenticen el proceso”, señaló Lowdon en una entrevista a Reuters.
EXPECTATIVAS REALISTAS PARA EL DEBUT
A pesar de las importantes inversiones y el respaldo corporativo de General Motors, desde el equipo adoptan una postura cautelosa respecto a los resultados deportivos en los primeros años. Según Lowdon, es razonable esperar que un equipo debutante ocupe las últimas posiciones al inicio, teniendo en cuenta la complejidad técnica y competitiva de la Fórmula 1 actual.
“Sería lógico que un nuevo equipo empiece en la parte trasera. Si no es así, significa que algo no funcionó como debería en otros equipos”, sostuvo el directivo, en alusión a la enorme exigencia que representa la máxima categoría.
Hasta el momento, Cadillac no anunció oficialmente a sus pilotos para la temporada 2026. Sin embargo, existen múltiples rumores en el paddock que vinculan a pilotos experimentados, jóvenes talentos e incluso figuras estadounidenses con el proyecto, considerando el interés de la Fórmula 1 en seguir expandiéndose en el mercado norteamericano.
La llegada de Cadillac a la F.1 se enmarca en un contexto de crecimiento sostenido de la categoría en Estados Unidos. Con tres Grandes Premios en suelo estadounidense (Miami, Austin y Las Vegas) y el creciente interés de las marcas norteamericanas, la incorporación de General Motors representa un paso estratégico para consolidar esa expansión.
Además, la F.1 busca incrementar el nivel de competitividad en la grilla con la incorporación de un nuevo equipo, lo que no sucedía desde la llegada de Haas en 2016.