La segunda edición del Gran Premio de Arabia Saudita de Fórmula 1 será recordado por ese sentimiento de inseguridad que invadió al paddock después de un atentado terrorista perpetrado el viernes mientras se realizaba la primera práctica libre. De hecho, eso puso en duda el evento, que finalmente continuó.
La incertidumbre se extendió hasta las primeras horas del sábado debido a que los pilotos de la categoría debatieron durante más de cuatro horas si corrían o no. Esto, sin dudas, habla a las claras de miedo que había en el circuito de Jeddah.
Aunque las palabras de las autoridades saudíes tranquilizaron a todos y por eso se continuó con el GP, es evidente que todas las partes involucradas en el Mundial deberán analizar qué pasará en el futuro con esta carrera. Tal como dijo el español Carlos Sainz, piloto del equipo Ferrari.
“Creo que será necesario que haya discusiones después de esta carrera porque claramente lo que sucedió en las últimas 24 horas es, definitivamente, un punto de discusión y consideración que debemos tomar en el futuro”, afirmó el madrileño durante la conferencia de prensa post clasificación.
Su postura fue respaldada por su compañero Charles Leclerc y por Sergio Pérez (Red Bull), quien se quedó con la pole position.
“Estoy de acuerdo. No quiero entrar demasiado en detalles sobre este tema ahora, pero definitivamente es una discusión que deberíamos tener después de esta carrera, una vez que todo se calme y lo revisaremos, y luego veremos”, apuntó el monegasco.
“Creo que definitivamente hay algunas consideraciones que tendremos que hacer como grupo y ver qué es lo mejor para el deporte en el futuro”, agregó el mexicano.
