El automovilismo argentino parece no dar respiro. Una vez más, asistimos al nacimiento de una nueva categoría, el Turismo Carretera 2000, que, lejos de representar una renovación o una oferta deportiva inédita, surge en el marco de una batalla ya conocida: las eternas luchas de poder en el automovilismo nacional. Esta vez, la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC) apadrina la creación de esta categoría que, según dicen, viene a ofrecer “lo que el TC2000 ya no puede dar”. Pero al examinar las razones y los métodos de su formación, surge una pregunta: ¿cuánto de innovación y cuánto de conflicto político esconde esta nueva categoría?
LA RECETA DE SIEMPRE: ALIANZA FALLIDA A COMPETENCIA DIRECTA
Detrás del Turismo Carretera 2000 está la Asociación Civil de Propietarios de Automóviles de Competición (ACPAC), fundada en abril de este año con el objetivo inicial de colaborar con los hermanos Levy, actuales responsables de la gestión del TC2000, para fortalecer la categoría. Sin embargo, esta colaboración fue fugaz.
Según una fuente de ACPAC consultada por Automundo, una reunión con los Levy fue suficiente para que decidieran cortar lazos y emprender su propio camino, aparentemente convencidos por comentarios de un periodista de que sus pedidos no serían escuchados.
La falta de nuevas reuniones con los Levy y el apresuramiento en la decisión de crear otra categoría sugiere que el proyecto de ACPAC ya estaba avanzando en esa dirección. De hecho, no es un detalle menor que el nombre Turismo Carretera 2000 ya estaba registrado por la ACTC el 23 de marzo, varios días antes de que la creación de ACPAC se oficializara durante la segunda fecha del TC2000 en Buenos Aires el 14 de abril. Quizá la idea de un nuevo campeonato nunca fue del todo ajena para la ACTC.
TURISMO CARRETERA 2000: UN PROYECTO CON EL SELLO DE LA ACTC
La flamante ACPAC, que tiene como rostros visibles a Roberto Valle, Javier Ciabattari, Alejandro Reggi y Marcelo Ambrogio, no perdió el tiempo en buscar el respaldo de la ACTC. Apenas dos semanas después de la creación oficial de ACPAC, Valle y Reggi se reunieron con Hugo Mazzacane, presidente de la ACTC, en la carrera del TC en Toay del 28 de abril.
De ahí en más, todo fue viento en popa para este proyecto, que muchos no dudan en llamar “el nuevo TC2000” con una clara intención de competir y opacar a la categoría original, que desde hace dos años intenta recuperarse de la mala gestión de la unidad de negocios del Grupo Clarín que la tuvo a su cargo.
Con esta jugada, la ACTC intenta fortalecer su posición en la disputa con el Automóvil Club Argentino (ACA) por el control deportivo en el automovilismo nacional. Este conflicto, que se intensificó a finales del año pasado, ha sacudido las bases del automovilismo local, provocando que muchas categorías y federaciones cambien de mando, del ACA a la ACTC, situación que incluso motivó la intervención de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) para exigir una solución.
VIEJOS AUTOS, NUEVOS MOTORES… Y LA PROMESA DEL RUIDO
El Turismo Carretera 2000 no esconde su esencia: los mismos sedanes que compiten hoy en el TC2000, pero con una motorización V6 de 500 caballos desarrollada por Oreste Berta SA.
En la última presentación de la TC Pick-Up en Alta Gracia, escenario identificado como territorio del TC2000 porque la mayoría de los equipos tienen sus sedes en sus inmediaciones, ACPAC mostró dos viejos Citroën C4 Lounge adaptados con esta motorización, sugiriendo el tipo de show que pretenden ofrecer.
Apuestan a que el rugido y la potencia de estos motores cautivarán al público, aunque los más tradicionalistas rechazan la idea de motores genéricos, un reclamo que ha perseguido al TC2000 desde que optó por estos impulsores hace dos décadas.
Los responsables del Turismo Carretera 2000 aseguran que el parque automotor de la categoría superará los 20 autos, un número ambicioso en el contexto actual. Además, varios pilotos del Turismo Carretera tendrían el aval de la ACTC para unirse a esta nueva especialidad, que en su primer año planea correr una docena de fechas, principalmente como telonera de campeonatos organizados por la ACTC.
Este último aspecto no es menor, ya que compartir eventos con el Turismo Carretera podría darle visibilidad inmediata al Turismo Carretera 2000. Esta dinámica podría captar el interés del fanático adicto al cronómetro y que podrá verificar cuál de las dos categorías es la más rápida. Mal que le pese a la que quede segunda en los tiempos…
EL FUTURO DE LA NUEVA CATEGORÍA
El Turismo Carretera 2000 arranca con promesas, pero también con una demanda en su contra. Autosports, la empresa que gestiona la marca TC2000, ha llevado el caso a la justicia debido a la similitud de nombre, argumentando un intento de apropiación indebida. Si la demanda prospera, la nueva categoría podría verse forzada a modificar su denominación, algo que igual no complicaría demasiado los planes de ACPAC y la ACTC.
En definitiva, el Turismo Carretera 2000 refleja el ciclo recurrente de conflictos y nuevas categorías en el automovilismo argentino, donde las estrategias de poder siguen marcando el rumbo tanto como la pasión por los fierros.
Bajo el disfraz de una propuesta renovadora, esta categoría parece responder más a la histórica táctica de eliminar al competidor desde adentro que a una verdadera búsqueda de innovación. Solo el tiempo dirá si el Turismo Carretera 2000 logra captar a los fanáticos por sus méritos deportivos, o si será recordado como otro capítulo en la serie de guerras políticas que han marcado el automovilismo argentino.
literalmente es una categoria telonera que recicla los viejos sedanes del tc2000 y el motor v6 del top race con un turbo incorporado, en fin una categoria mas que dentro de 5 años no va a existir, simplemente un kiosquito mas del la actc.