Durante la prueba que realizó sobre un auto de la categoría estadounidense IndyCar, el arrecifeño Agustín Canapino tuvo la posibilidad de compartir el circuito chico de Sebring con otros cuatro pilotos.
El Titán, que se puso al volante del Dallara-Chevrolet del Juncos Hollinger Racing que tiene como copropietario al argentino Ricardo Juncos, completó más de cien vueltas y quedó a casi un segundo y medio del más rápido.
Ese registro colocó al astro argentino en el quinto y último lugar, aunque bien vale destacar que estos tests solo tuvieron como objetivo sumar kilómetros y adaptarse al vehículo con el cual realizará exhibiciones en Buenos Aires y Termas de Río Hondo a principios de noviembre.
Además, sus eventuales rivales en esta sesión fueron pilotos con más experiencia en monopostos. Otro dato no menor: cada uno de ellos giró para demostrar sus condiciones de cara a ser incorporados en 2023 por las escuderías con las que probaron.
El más veloz de la jornada fue el británico Tom Blomqvist (Meyer Shank Racing), que marcó 52s708/1000. Más atrás se ubicaron el estonio Juri Vips (Rahal Letterman Lanigan), 53s038; el inglés Jake Dennis (Andretti Autosport), 53s186; el neozelandés Marcus Armstrong (Dale Coyne Racing), 53s473; y Canapino, 54s113.
Tras este test, Canapino emprendió el regreso a la Argentina para continuar con su agenda deportiva. Su próximo contacto con el Dallara-Chevrolet será el 4 de noviembre durante la presentación oficial de las exhibiciones.
Dos días más tarde girará en el autódromo de Buenos Aires en el marco de la presentación del Turismo Nacional en el escenario porteño. Mientras que el 9 de noviembre hará lo propio en el Circuito Internacional de Termas de Río Hondo.
