La trepada de Pikes Peak es considerada una de las subidas de montaña más duras del mundo. Desde 1916 seduce a pilotos y marcas por el desafío que significa alcanzar en el menor tiempo posible la meta en la cima de las Rocallosas de Estados Unidos. Conocida como “La Carrera hacia las Nubes”, la edición 2018 contó por primera vez con una categoría monomarca: la Porsche Cayman GT4 Clubsport Pikes Peak Hill Climb Trophy by Yokohama auspiciada por la marca de Stuttgart.
Ocho pilotos fueron invitados a competir en esta categoría exclusiva. Seis de ellos compitieron por primera vez, igualmente algunos no habían conducido un Porsche GT4 Clubsport Cayman antes de iniciar los entrenamientos para esta competencia.
El recorrido de Pikes Peak, de 19,99 kilómetros, serpentea por 156 curvas con su línea de llegada a 4.301 metros sobre el nivel del mar. Sin barreras protectoras a los lados de la carretera y básicamente sin margen de error, con escarpadas paredes rocosas que descienden a la nada junto a la estrecha vía. Estas son las cosas que hacen que la carrera a la cima sea tan cautivadora.
Subir más de 1.400 metros de altitud en menos de 10 minutos tiene consecuencias tanto para el hombre como para la máquina porque cuando hay poca densidad de aire, la potencia del motor se reduce drásticamente (hasta 30 por ciento). Cuanto más suba el auto por la montaña tendrá menos potencia, menos agarre y sufrirá cambios en las temperaturas de los neumáticos y del motor.
Entre los participantes de la flamante división se encontraban Travis Pastrana, campeón de motocross, ganador de los X Games y doble en escenas peligrosas en película de cine; CJ Wilson, el ex jugador de béisbol profesional, y Till Bechtolsheimer, piloto de la categoría IMSA.
“Pikes Peak es una carrera con un estatus de culto”, dijo Pastrana, quien tras haber participado en las ediciones de 2004 y 2005 estaba emocionado de correr de nuevo, esta vez en un Porsche. La experiencia previa del temerario piloto ciertamente le fue muy útil: fue el ganador de la clase Porsche GT4 Cayman Clubsport, con un tiempo de 10 minutos y 34 segundos. JR Hildebrand, protagonista de la IndyCar, también logró un tiempo de menos de 10 minutos y 40 segundos.
Los conductores que compitieron en la nueva categoría Porsche fueron entrenados por Jeff Zwart, una verdadera leyenda de Pikes Peak. El director de cine y piloto de carreras comercial ha participado en la famosa subida de montaña en 14 oportunidades; en ocho de ellas logró la victoria y múltiples registros en la división Time Attack. Todas sus victorias las consiguió con en variantes del Porsche 911. Zwart decidió no buscar su novena corona este año para poder compartir su amplia experiencia con los pilotos de la categoría Porsche Cayman GT4 Clubsport y apoyarlos durante la práctica y la competencia.