Luego de un inicio de temporada poco favorable tras abandonar en las 1.000 Millas de Sebring, primera fecha del Mundial 2022 del WEC, José María López espera desquitarse este sábado en las 6 Horas de Spa-Francorchamps.
El cordobés compartirá el Toyota GR010 HYBRID del Toyota GAZOO Racing con el inglés Mike Conway y el japonés Kamui Kobayashi, con quienes logró el cetro de la especialidad en los últimos dos años.
“Sebring fue un resultado realmente decepcionante y todavía estoy frustrado por lo que pasó. Estoy decidido a compensar a Mike, a Kamui y todo el equipo con una buena carrera en Spa”, dijo López, que se despistó en la pista estadounidense y dañó severamente el prototipo.
“Esta siempre es una carrera importante porque es la última antes de Le Mans, así que tenemos que prepararnos bien y ponernos en el mejor lugar para la gran carrera. Espero que seamos más competitivos de lo que fuimos en Sebring y estemos en condiciones de luchar por la victoria”, agregó Pechito.
El WEC será la primera serie importante en competir en la pista belga desde que se modificó parte del circuito de 7.004 km para mejorar la seguridad. Uno de los cambios más destacados se produjo en la temible combinación de Eau Rouge y Raidillon, que se ha renovado y ahora presenta áreas de escapatoria más grandes.
Los participantes tomarán contacto el circuito actualizado por primera vez el jueves, con una sesión de práctica de 90 minutos al final de la tarde. Un viernes ajetreado verá dos sesiones de práctica más antes de una clasificación vespertina, que decidirá la parrilla para la carrera del sábado que se largará a las 8 de la Argentina.
El trío compuesto por el brasileño André Negrao y los franceses Nicolas Lapierre y Matthiew Vaxiviere, con un Alpine A480–Gibson del Alpine Elf Team, llegan al frente del torneo tras su triunfo en Sebring. Sin embargo, el auto de la marca gala deberá sobreponerse a correr con 26 CV menos debido a la modificación impuesta por la categoría a través del Balance de Performance (BoP)