Ferrari contra Red Bull. Charles Leclerc contra Max Verstappen. Para la vuelta de la Fórmula 1 a Australia después de dos años de ausencia por la pandemia de coronavirus, la batalla anunciada para 2022 continuará este fin de semana.
El duelo entre Verstappen, vigente campeón del mundo, y Leclerc, actual líder del campeonato, se disputará sobre el trazado de Albert Park en Melbourne, con ligeras modificaciones que prometen una mayor velocidad y acción para la tercera carrera de la temporada.
“Debería haber más posibilidades de adelantamientos ahora, lo que siempre es positivo. También será interesante ver cómo se comporta el coche en Australia, la pista puede ser a veces demasiado polvorienta”, declaró el neerlandés, vencedor del último Gran Premio de Arabia Saudita, a finales de marzo. “Espero que podamos tener otro fin de semana sin problemas para el equipo”, dijo también.
La razón: durante el GP inaugural de la temporada en Bahrein, a mediados de marzo, un problema en la alimentación de combustible provocó el abandono de los dos monoplazas de Red Bull en las últimas tres vueltas.
Una situación aprovechada por la Scuderia, actual líder de la clasificación de constructores, que había dejado de lado 2021 para concentrarse en la preparación de 2022, después de una temporada 2020 en la que Ferrari tuvo su peor resultado desde 1980 (6ª).
La estrategia por el momento ha dado sus frutos, ya que la escudería italiana empezó la temporada de manera perfecta en Bahrein, con victoria de Leclerc seguido por su compañero Carlos Sainz, y en Arabia Saudita el monegasco y el español clasificaron 2º y 3º, detrás de Verstappen.
Gracias a sus dos dobles podios, Leclerc (45) y Sainz (33) superan a Verstappen (25) en la clasificación general.