
La noche mendocina envuelve los viñedos de ANAIA, donde los aromas a Malbec flotan en el aire y la tecnología se mezcla con la sofisticación. No es una cata de vinos, aunque los matices de esta presentación también despiertan los sentidos. Es que Kia Argentina eligió este paisaje emblemático para lanzar el All-New K3, un modelo que llega con la ambición de redefinir el segmento subcompacto.
UNA ESTÉTICA QUE DESAFÍA LO CONVENCIONAL
Kia tiene una filosofía de diseño que suena casi a una premisa filosófica: “Opposites United”. Opuestos unidos, como si el diseño pudiera jugar entre la agresividad y la elegancia sin perder equilibrio. Y en el K3, esa premisa cobra sentido. El frontal es imponente, con ópticas integradas a la parrilla y faros LED verticales que lo hacen inconfundible, como la firma de un artista en su lienzo.
Dos versiones, dos personalidades: el Sedán, con una caída tipo fastback que lo hace parecer en movimiento incluso cuando está detenido, y el Cross, que con su mayor despeje y barras de techo habla de aventuras urbanas y escapadas de fin de semana. Para los que buscan un toque extra de deportividad, la versión GT-Line suma entradas de aire más grandes, llantas de 17 pulgadas y una doble salida de escape que le da un guiño a la adrenalina.
UN INTERIOR PENSADO PARA DISFRUTAR CADA KILÓMETRO
Subirse al K3 es entrar en un espacio donde la modernidad y la funcionalidad conviven en armonía. El tablero digital es una pantalla curva de 10,25 pulgadas que fusiona el cuadro de instrumentos con el sistema multimedia, compatible con Android Auto y Apple CarPlay. A esto se suman puertos USB en todas las plazas, cargador inalámbrico y una iluminación ambiental que transforma el habitáculo en un refugio de tecnología y confort.
La amplitud también es protagonista. El baúl del K3 Sedán es una auténtica cueva del tesoro del segmento B, con 544 litros de capacidad, superando incluso a algunos modelos del segmento C. En el Cross, la combinación de versatilidad y espacio se traduce en un confort que pocas veces se encuentra en esta categoría.
SEGURIDAD SIN CONCESIONES
Todas las versiones traen frenos a disco en las cuatro ruedas, ABS, control de estabilidad y seis airbags. Pero la verdadera revolución está en su paquete ADAS, con asistencias que incluyen prevención de colisiones, mantenimiento de carril, detección de puntos ciegos y tráfico cruzado trasero. Con este arsenal tecnológico, no sorprende que haya conseguido cinco estrellas en Latin NCAP.
UN CORAZÓN EFICIENTE Y EQUILIBRADO
Bajo el capó, Kia apuesta por un motor naftero de 1.6 litros con cadena de distribución, que entrega 121 caballos de fuerza y 151 Nm de torque. Asociado a una transmisión automática de seis marchas con convertidor de par, ofrece una conducción suave y eficiente, con un equilibrio perfecto entre rendimiento y consumo.
Con precios de 25.000 dólares para la versión EX y 28.500 dólares para la GT-Line, el K3 no solo compite en su segmento: lo redefine. Y lo hace con una garantía de cinco años o 100.000 km, una jugada que demuestra la confianza de la marca en su producto.
Kia entendió que el público argentino quiere más, y con este modelo, dejó claro que está dispuesta a dárselo.
EL LANZAMIENTO DEL KIA K3 EN FOTOS
Las fotos publicadas en esta galería fueron tomadas con un moto g75 5G.
Mendoza no fue una elección casual para este debut. ANAIA, con su combinación de naturaleza e innovación, fue el marco ideal para un modelo que busca diferenciarse. Experiencias como las cenas Full Moon Dining by Kia, con chefs de primer nivel bajo la luna llena, crearon el ambiente perfecto para presentar al K3 en sociedad.