A horas del inicio del Rally Dakar 2025, que se disputará del 3 al 17 de enero en Arabia Saudita, el salteño Kevin Benavides analizó su presente y expectativas para esta nueva aventura después del grave accidente que sufrió en mayo pasado. A unos pocos meses de aquel suceso y tras recuperarse en tiempo récord de las graves heridas, el piloto del equipo oficial KTM relató en el podcast Dakarianos cómo cambió su vida, su enfoque y su forma de pilotar, demostrando que la verdadera fortaleza radica en adaptarse y superar las adversidades.
El ganador del Dakar en 2021 y 2023 inició este año con objetivos claros: mantenerse en forma y evitar lesiones. Sin embargo, la vida le presentó un desafío inesperado. El 11 de mayo, mientras entrenaba motocross en su Salta natal, sufrió un accidente que casi le cuesta la vida.
“Fue el peor accidente de mi carrera deportiva”, confesó Benavides. “Me caí en un salto y no recuerdo nada de lo que pasó. Cuando desperté, estaba en un hospital sin entender por qué estaba ahí”. La lesión más grave fue en la cabeza, acompañada de un complicado golpe en el brazo. Este evento puso en pausa su actividad deportiva y lo enfrentó a meses de recuperación física y psicológica.
A pesar de las adversidades, Benavides está decidido a competir en el Dakar 2025. Sin embargo, admite que no estará al 100% físicamente. “He trabajado estos siete meses para llegar lo mejor posible, pero sé que no estaré al máximo. Lo que sí puedo asegurar es que estoy dando mi 100% cada día para mejorar, aunque sea un 1% más”.
Frente a esta situación, Benavides ha optado por modificar su estilo de conducción. Reconoce que ya no podrá ser tan agresivo como antes, pero confía en que su experiencia será su mayor aliada. “Voy a manejar con inteligencia, sabiendo cómo enfrentar cada etapa. Es un desafío enorme, pero también es lo que me motiva. Me adaptaré a lo que mi cuerpo me permita y buscaré sacar el mejor provecho de mi preparación”.
El camino de Kevin Benavides hacia el Dakar 2025 no ha sido fácil, pero el piloto salteño demuestra una resiliencia inquebrantable. Desde aquel accidente, ha trabajado incansablemente para volver a subirse a la moto y enfrentarse al rally más duro del mundo. “No sé en qué porcentaje llegaré, pero lo importante es que estoy aquí, dando lo mejor de mí”, concluyó de cara a una edición que también será especial desde lo afectivo, ya que por primera vez compartirá equipo con su hermano Luciano.
Con una combinación de experiencia, inteligencia y pasión, Kevin Benavides se perfila como uno de los pilotos más inspiradores en la edición 2025 del Dakar. Su historia no solo es un ejemplo de superación, sino también de cómo adaptarse ante las adversidades para seguir persiguiendo los sueños.
