Pretende reestructurar una deuda total de 3.600 millones de dólares para proseguir con el desarrollo del negocio.
El fundador de Faraday Future, Jia Yueting, se ha declarado en bancarrota en Estados Unidos con el fin de reestructurar una deuda total de 3.600 millones de dólares, lo que permitiría a la compañía china que pretende competir con Tesla en la fabricación de coches eléctricos proseguir con el desarrollo del negocio.
Según la declaración voluntaria de bancarrota presentada por Yueting el pasado 14 de octubre ante los juzgados de Wilmington, en el estado de Delaware, los acreedores con los que ha contraído la deuda ascienden a un total de entre 100 y 199 organismos chinos.
De los 3.600 millones de dólares del pasivo total, Yueting ha deducido los 1.600 millones de dólares que afirma mantener en activos congelados en China y que servirán para saldar la deuda. Además, Yueting ya ha devuelto otros 3.000 millones de dólares a parte de sus acreedores.
El plan del fundador de Faraday Future pasa por transferir toda la participación que mantiene actualmente en Smart King, la compañía matriz de la empresa, a los acreedores, de forma que estos tengan plenos derechos sobre Faraday Future.
Posteriormente, con un nuevo impulso al negocio, sobre todo desde China, Yueting prevé sacar la compañía a Bolsa, con el fin de que los nuevos accionistas de Faraday recuperen el dinero prestado, renunciando él a formar parte de los intereses económicos derivados de esta operación.
Según la compañía, esta petición de reestructuración de su deuda personal no afectará a la propiedad de acciones por parte de los empleados, que “seguirá siendo una herramienta eficaz para ayudar a Faraday a asistir continuamente en la captación de talento”, señala.
En 2017, la compañía desveló, en un evento previo a la feria electrónica CES de Las Vegas, su modelo eléctrico FF 91, prometiendo una potencia de 1.050 caballos y una autonomía de más de 700 kilómetros.