El automovilismo argentino está de luto. Esta mañana falleció Alberto Canapino, uno de los preparadores más destacados del país. El arrecifeño estaba internado desde hace una semana en un sanatorio de Buenos Aires después de haber dado positivo de coronavirus. Tenía 57 años.
En las últimas tres décadas los autos de Canapino se cansaron de ganar carreras y campeonatos, principalmente en el Turismo Carretera donde festejó cetros con pilotos del nivel de Juan María Traverso, Guillermo Ortelli y si propio hijo, Agustín.
Justamente, el pasado domingo Agustín se impuso en la última fecha del Súper TC2000 en Buenos Aires y le dedicó la victoria con un tono en sus palabras que denotaban la gravedad del estado de saludo de su padre.
Había comenzado en el deporte motor en el motociclismo, aunque rápidamente se dio cuenta que conducir motos no era lo suyo. Su espíritu inquieto y sus ganas de progresar lo motivo a pedir trabajo en el taller de Rubén Luis Di Palma, quien le dio la oportunidad. Con el Loco logró muy buenos resultados en el TC2000 que le abrieron las puertas en el automovilismo grande.
Era un apasionado de la mecánica y un gran analista de la actualidad. Sus autos no solo brillaron en las pistas argentinas, sino que también construyó un auto para el rally Dakar y hasta proyectó un NASCAR que estuvo cerca de hacerse realidad. Su último proyecto en conjunto con Agustín, su gran dídolo, a través de la Scuadra Canapino del Turismo Carretera.
Sin dudas, se lo extrañará muchísimo.
En este video, la última entrevista que le realicé a Alberto en el marco de una serie de charlas que hice en el contexto de la cuarentena por coronavirus a mediados de 2020…