Esteban Tuero y aquel inesperado adiós a la Fórmula 1: ¿Por qué se retiró?

El mundo de la Fórmula 1 es testigo de historias fascinantes, de pilotos que se convierten en héroes, de equipos invencibles y, en ocasiones, de decisiones sorprendentes. Como la que tomó Esteban Tuero, quien llegó a la Máxima a la tierna edad de 19 años y 320 días y decidió jubilarse a semanas de cumplir 21…

Tuerito desembarcó en la F.1 en 1998, después de correr en la Fórmula Renault,  Turismo Nacional (1993) y Fórmula Honda (1994); y hacer experiencia en categorías internacionales como la Fórmula 3 Italiana (1995), la Fórmula 3000 Internacional (1996) y la Fórmula Nippon (1997).

El 7 de marzo, en el Gran Premio de Australia, el pibe argentino se convirtió en el tercer piloto más joven en competir en la F.1. Solo lo superaban el neozelandés Mike Thackwell y el mexicano Pedro Rodríguez en términos de juventud al momento de enfrentar el desafío de la máxima categoría del automovilismo.

UNA TEMPORADA DE ALTIBAJOS

Tuero se estrenó en la F.1 al volante de un Minardi, un equipo que solía luchar en la retaguardia de la parrilla. El joven argentino enfrentó múltiples desafíos durante aquel año. De los 11 abandonos que sufrió en 16 competencias, cinco de ellos fueron resultado de errores propios, incluyendo cuatro despistes y un choque en Japón. Los seis restantes se debieron a fallas en su monoplaza italiano, incluyendo roturas del motor, problemas en la caja de cambios y dificultades eléctricas.

Completó un total de 3.031,76 kilómetros, lo que representó el 62,51% de los 4.850,30 kilómetros recorridos durante aquel Mundial. Cruzo la línea de meta en cinco ocasiones y su mejor resultado fue un 8º puesto en el Gran Premio de San Marino, en Imola. En el Gran Premio de Argentina, su carrera, abandonó.

El entusiasmo que tenían los fanáticos argentinos por contar con un compatriota en la F.1 durante todo un campeonato, algo que no sucedía desde 1988 con Oscar Larrauri, dejó en un segundo plano los resultados obtenidos por Tuero.

Tal es así que él mismo se tomaba con un humor el hecho de “ser el último”, algo que quedó plasmado en una publicidad de Banco Provincia para promocionar su servicio de débito automático. En esa época todos apostaban a que la experiencia adquirida le permitiría sobresalir al año siguiente…

LA INESPERADA DESPEDIDA

Sin embargo, en enero de 1999, cuando faltaban pocas semanas para el inicio de la pretemporada y su 21° cumpleaños estaba en el horizonte, Esteban Tuero sorprendió al mundo con una noticia: decidió retirase pese a que ya tenía su lugar asegurado con Minardi. Su retiro dejó a todos atónitos. Ni siquiera el equipo entendió completamente los motivos detrás de su elección.

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Sus razones se mantuvieron en secreto durante años porque jamás quiso hablar públicamente del tema. Recién en 2019, en una entrevista con el diario La Nueva Provincia, Tuero arrojó algo de luz sobre el tema: “La aventura de la Fórmula 1 fue muy linda, pero me agarró muy chico y necesité volverme porque extrañaba. A lo mejor corté una carrera que podría haber sido mucho más interesante. Pero bueno, el objetivo de llegar lo conseguí. Obviamente, me gustaría volver al pasado con la experiencia de hoy y tratar de hacer mejor algunas cosas”.

De todas formas, aún queda la duda si su decisión en realidad no tuvo que ver con una supuesta orden que recibió por parte de Minardi durante el Gran Premio de Japón, en la que fue su última carrera. En esa competencia el argentino le pegó al japonés Toranosuke Takagi, de Tyrrell. Con el nipón afuera la escudería italiana superó al team inglés en la Copa de Constructores y accedió a un bono de 12 millones de dólares…

Tras decirle adiós a la Fórmula 1, Esteban Tuero retomó su campaña deportiva en la Argentina. Corrió en TC2000 y Turismo Nacional, categoría que lo tuvo como campeón de la Clase 3 en 2008. Dejó de competir en 2016 y desde entonces se dedica a su empresa relacionada con las suspensiones neumáticas para colectivos y camiones.

Casi todos los días se lo ve por Caballito, el barrio de toda su vida. Solo unos pocos se dan cuenta que aquel hombre de 42 años de barba prominente alguna vez fue piloto de Fórmula 1.

LA CAMPAÑA DE ESTEBAN TUERO EN LA FÓRMULA 1