Uno de los vehículos más llamativos en el bivouac del Rally Dakar 2024 es el Citroën 2CV conducido por el dúo checo compuesto por Barbora Holicka y Lucie Engova. Este par decidido y lleno de energía ha optado por hacer su debut en el Dakar Classic, llevando consigo este vehículo que han decorado con un caleidoscopio de colores fluorescentes, gracias a la colaboración del artista pop checo Josef Rataj.
La presencia de este auto del equipo Czech Samurais no pasa desapercibida. Aunque Barbora ha estado compitiendo en el campeonato checo de rally durante más de una década, es nueva en el rally-raid y admite que nunca esperó estar en la línea de salida del Dakar.
A diferencia de Barbora, Lucie Engova proviene de una familia con profundas raíces en el automovilismo. Su padre, Bretislav Enge, tuvo una extensa carrera en automóviles de turismo, compitiendo para el equipo de fábrica de BMW en la década de 1980. Posteriormente, se unió a Lucie para participar en el campeonato checo de rally para autos históricos.
Mientras tanto, su hermano Tomas Enge, quien completó el Dakar 2021 en un SSV, es uno de los nombres más destacados en el automovilismo checo y el único piloto de su país que ha corrido en la Fórmula 1.
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ATENCIÓN DAKARIANO: Todas las noticias del Rally Dakar también están disponibles en nuestro canal oficial en Whatsapp dedicado a la carrera más dura del mundo Te invitamos a que se sumen a través del siguiente link. Lamentablemente, la jefa del equipo, Olga Rouckova, se vio obligada a retirarse del Dakar Classic unas semanas atrás debido a que su piloto, Ondrej Martinec, tuvo que someterse a una cirugía cardíaca. Barbora y Lucie asumirán la representación de la escudería con su “Duckar”, como bautilizaron al icónico Citroën 2CV.
“Vine al Dakar 2023 por dos días para verla a Olga y al equipo. Yo ya estaba planeando cómo hacer para correr. Ella me sugirió empezar por el Dakar Classic, porque es la forma más fácil de descubrir el rally. Me tentó el ZX Rallye-Raid, ¡pero es imposible pagarlo! Entonces un amigo dijo: ‘Tienes que optar por el 2CV, será lo más divertido’. Quizás hubiera sido más fácil y económico optar por otro coche, pero creo que fue la decisión correcta, porque a todo el mundo le encanta el proyecto”, reconoció Barbora.
“Hay una comunidad increíble en torno a este automóvil. El apodo de un 2CV es Pato porque se mueve como un pato. A nuestro proyecto lo bautizamos como Duckar porque el coche es modelo 1979, que fue el año del primer Dakar”, agrega la piloto que aspira a que esta incursión en el Dakar Classic allane su camino para futuras participaciones en el Dakar principal.
