Concluyó con gran éxito la edición 2023 de las 1000 Millas Sport, la competencia de autos sport históricos más prestigiosa de América Latina. Del 23 al 25 de noviembre, los participantes exploraron las ciudades y paisajes más emblemáticos del sur andino, atravesando Bariloche, Villa La Angostura, San Martín de los Andes y Junín de los Andes, en un recorrido panorámico a lo largo del escénico camino de los 7 Lagos.
Este año, el evento contó con la participación de 110 tripulaciones al volante de vehículos fabricados desde fines de la década de 1920 hasta mediados de los ‘70, conforme a las regulaciones de la Federación Internacional de Vehículos Ancianos (FIVA) y dentro de la lista de autos sport admisibles.
Cada jornada, los competidores partieron desde el clásico Hotel Llao-Llao, recorriendo un total de 1.600 kilómetros. A lo largo del trayecto, se enfrentaron a desafiantes pruebas de regularidad y precisión, poniendo a prueba tanto la calidad de los vehículos como la destreza de los conductores para no sufrir penalizaciones.
El triunfo quedó para Alejandro López y Gabriel Gourovich sobre un Alfa Romeo 6C 1750 SS de 1929. El podio se completó con Juan Tonconogy y Bárbara Ruffini con un Riley Sprite de 1936 y Daniel Erejomovich y Gustavo Llanos con un AC 16/80 Comp. Sport de 1938.
“Cada edición es un nuevo desafío que nos impone ser creativos para ofrecer nuevas variantes a los participantes, tanto desde el aspecto deportivo como desde la hospitalidad, pero sin alejarnos de la tradición y esencia de las 1000 Millas Sport. Luego de tanto empeño la mejor recompensa es observar y recibir la alegría y disfrute de los participantes, lo cual nos da una enorme satisfacción como organizadores”, explicó Fernando Briones, Presidente del Club Automóvil Sport
El cierre del evento, que contó con el respaldo de Puma Energy, se llevó a cabo con la entrega de premios en la clásica gala celebrada en el Hotel Llao-Llao, conducida por Iván de Pineda y Andrea Frigerio. Durante la velada, se realizó el tradicional remate de objetos vinculados al automovilismo, recaudando fondos para el Banco de Alimentos y las ONG locales, como la Fundación Challenger de Bariloche y la Fundación Puentes de Luz de San Martín de los Andes.
