Resulta extraño ver a Sébastien Loeb calzado con un buzo azul con vivos celestes y rojos. Eso tiene que ver con su nuevo desafío: defender los colores de Hyundai en el Mundial de Rally después de toda una vida vinculado a Citroën y al Grupo PSA. Incluso él mismo confiesa que con su nueva vestimenta se siente algo extraño en la previa del Rally de Montecarlo, la primera cita de la temporada 2019 de la especialidad en la que se coronó nueve veces de manera consecutiva.
“Tras haber pasado tanto tiempo con un mismo fabricante, costará tiempo acostumbrarse”, cuenta Seb en relación a la vestimenta oficial del Hyundai Motorsport. “Sin embargo, me gustan mis nuevos colores y estoy deseando que comience la temporada porque será emocionante”, agregó.
El inicio de esta nueva etapa llega en un escenario que conoce muy bien, como lo demuestran sus siete victorias entre 2003 y 2013. “El Rally de Montecarlo es uno de nuestros favoritos. Daniel Elena, mi navegante, es monegasco, por lo que es su rally en casa, mientras que también es una especie de evento en casa para mí, ya que todas las especiales están en Francia”, apuntó el múltiple campeón.
“Las condiciones pueden afectar mucho a la carretera en el Monte, ya sea asfalto, nieve o hielo. Lo más complicado es encontrar el ritmo correcto y no caer en ninguna trampa: existe la posibilidad de encontrar placas de hielo cuando la temperatura desciende durante la noche. Siempre hay que adaptarse a las condiciones cambiantes e impredecibles. He sido bastante competitivo en estas circunstancias. Este año será especialmente especial con un nuevo equipo y un nuevo coche, pero estoy muy motivado”, agregó.
Respecto a sus aspiraciones para 2019, Loen no dudó en afirmar que los triunfos son posibles. “Por supuesto que espero luchar por las victorias, pero al mismo tiempo sé que será un reto difícil volver a WRC con un nuevo coche y un nuevo equipo. Espero acostumbrarme rápidamente al i20 Coupe WRC, poder mostrar un buen ritmo y, quizás, incluso estar en la pelea por el triunfo”.
Si el hombre lo dice, habrá que creerle…