Desde que el automovilismo argentino comenzó a utilizar el sistema de lastre para “emparejar” a las categorías -hace ya más de 25 años- se han sucedido situaciones que siempre han atentado contra el espíritu del deporte motor.
En la década de 1990, por ejemplo, Juan María Traverso prefería salir cuarto en el Turismo Carretera a subir al podio o incluso ganar porque era la posición que más puntos otorgaba sin cargar kilos. Los títulos que logró el Flaco en esa época demostraron que tenía razón.
El objetivo de no tener peso extra en el auto volvió a la palestra y repercutió en la final de la Clase 3 del Turismo Nacional en Termas de Río Hondo, por lejos la especialidad que mejores espectáculos ofrece. O al menos lo hacía…
La situación fue insólita porque no fue como en la época de Traverso, quien corría para salir cuarto pese a tener un auto ganador. En este caso los que estaban luchando por la victoria, Leonel Pernía y Facundo Chapur, evitaron lograrla levantando en la última curva a metros de la bandera de cuadros.
Cualquier duda de sus intenciones quedó despejada con sus declaraciones. Es que ambos confesaron que no tenían intenciones de ganar. Algo lógico si se tiene en cuenta lo que indica el reglamento deportivo…
El artículo 15 referido al handicap de peso indica que “el ganador de cada clase hará la carga y descarga según tabla de descarga, pero nunca podrá tener menos de 25 kg en la Clase 2 y 30 kg en Clase 3. En la segunda victoria se incrementará el peso para Clase 2 en 37,5 kg y para Clase 3 en 45 kg los cuales no se descargan hasta finalizar el campeonato”. Y esto último es lo que querían evitar Pernía y Chapur, quienes ganaron en Paraná y La Rioja, respectivamente.
La táctica aplicada por ambos pilotos, que en el fragor de la “lucha” se tocaron en la última vuelta, le permitió a Sebastián Gómez superarlos en la última variante por la banquina para así quedarse con ese éxito que ellos despreciaron.
El TN deberá convivir con estas reglas durante todo el 2022 aunque queda claro que, como se estimaba antes del inicio de la temporada, este sistema tiene más contras que cosas favorables, algo que no sucedía con la escala de carga y descargas de kilos usada hasta 2021.