La nostalgia y la emoción se apoderaron de los fanáticos del Turismo Carretera en la previa de la penúltima fecha en Toay, cuando cinco vehículos de la nueva generación de la popular categoría recorrieron cuatro kilómetros de la Ruta Provincial 14. Esta exhibición, en la que participaron Christian Ledesma (Chevrolet Camaro), Germán Todino (Ford Mustang), Sergio Alaux (Chevrolet Camaro), Lautaro de la Iglesia (Dodge Challenger) y Gastón Ferrante (Toyota Camry), reunió a una multitud de espectadores que rememoraron aquellos tiempos dorados del TC en ruta, una época donde cada carrera era una fiesta para el automovilismo argentino.
La gran acogida de esta demostración ha inspirado a Automundo a proponer una idea innovadora: volver a incluir una carrera en ruta en el calendario oficial del Turismo Carretera.
LA PROPUESTA DE AUTOMUNDO: UNA CARRERA ESPECIAL EN LA RUTA
Inspirada en el fervor popular de esta exhibición en la Ruta 14, nuestra propuesta plantea una carrera en un circuito semipermanente exclusivamente para los 15 pilotos que disputan la Copa de Oro. Este evento especial permitiría a los competidores sumar puntos adicionales y añadir una dosis de estrategia y adrenalina a la definición del campeonato.
Esta carrera contrarreloj, diseñada pensando en la seguridad y en maximizar el espectáculo, se realizaría en una única jornada de domingo y contaría con una tanda de entrenamientos seguida por una clasificación que definiría el orden de salida de la final en un formato “inverso”, es decir, los pilotos más veloces largarían últimos.
Cada piloto partiría de manera individual, con intervalos de tiempo entre cada uno, asegurando una competencia segura y emocionante que minimice los riesgos propios de la carretera. Con este formato, se revive el espíritu del Turismo Carretera en ruta, al tiempo que se adapta a las medidas de seguridad actuales.
TANDÍL: UN ESCENARIO DE LEYENDA PARA UN REGRESO HISTÓRICO
La elección del semipermanente de Tandíl para esta competencia no sería casualidad. Apodado como el “Nürburgring Argentino” por su extensión y complejidad, el circuito rutero de 32 kilómetros pondría a prueba no solo la destreza de los pilotos sino también la capacidad técnica y estratégica de cada equipo.
Este trazado natural, con una mezcla de curvas cerradas, extensas rectas y paisajes únicos, exige una preparación minuciosa en los vehículos, que deberán estar adaptados a un entorno totalmente distinto al de los autódromos.
TURISMO CARRETERA: UNA HISTORIA EN LA RUTA QUE PIDE UN REGRESO
Aunque la ruta fue el escenario natural del TC, las tragedias que golpearon a la categoría en los ’90 con las muertes de Roberto Mouras (en Lobos) y Osvaldo Morresi (en La Plata) llevaron a la categoría a migrar hacia circuitos cerrados en busca de seguridad. Así fue que el 16 de febrero de 1997, el Turismo Carretera se despidió definitivamente del escenario que la vio nacer con la carrera que ganó Eduardo Ramos en el Triángulo del Tuyú, en Santa Teresita.
Aunque hubo incursiones esporádicas en circuitos semipermanentes como Punta Indio (2001), Bahía Blanca (2002), Potrero de los Funes (2009) y La Pedrera (2017 y 2018), una competencia en ruta completa sería una oportunidad de oro para revivir el espíritu aventurero que marcó los orígenes del TC.
Con un formato de carrera adaptado a las necesidades actuales de seguridad y un escenario desafiante tanto a pilotos como a equipos, el regreso del Turismo Carretera a la ruta podría ser posible. Ahora, queda en manos de la Asociación Corredores turismo Carretera evaluar esta idea y darle forma a lo que podría ser un eventos automovilístico histórico. ¿Y a vos qué te parece?
