Pirelli y Bosch, dos gigantes de la industria automotriz, han unido fuerzas en una innovadora alianza que busca revolucionar el futuro de los neumáticos y la seguridad en la conducción.
Ambas empresas están trabajando en el desarrollo de soluciones avanzadas basadas en software y en funciones de conducción mediante el uso de sensores integrados en los neumáticos, conocidos como “in-tyre sensors”. Este enfoque promete no solo mejorar la seguridad y el confort de los conductores, sino también optimizar la dinámica de conducción y contribuir a la sostenibilidad de los vehículos.
NEUMÁTICOS INTELIGENTES EN TIEMPO REAL
La joya tecnológica de esta colaboración es el sistema Pirelli Cyber Tyre, el primer sistema de neumáticos en el mundo equipado con sensores que recopilan datos en tiempo real. Estos sensores integrados transmiten información clave directamente al vehículo, lo que permite procesar y ajustar automáticamente las condiciones de conducción para maximizar el rendimiento y la seguridad.
Este avance ha sido probado con éxito en colaboración con Pagani Automobili, en el exclusivo Pagani Utopia Roadster, donde los neumáticos inteligentes permiten una interacción directa con el sistema de control electrónico de estabilidad (ESP).
TECNOLOGÍA DE SENSORES Y SOFTWARE
Bosch, con su amplio bagaje en tecnología y servicios, aporta a esta alianza su experiencia en hardware y software de sistemas. Un punto clave de su contribución es la integración de sensores MEMS (sistemas microelectromecánicos) en los neumáticos, que funcionan bajo el estándar Bluetooth Low Energy (BLE), lo que asegura un bajo consumo energético. Esta tecnología permite que los datos recopilados por los sensores Pirelli sean procesados y transmitidos en tiempo real al sistema de control del vehículo, ofreciendo parámetros precisos para optimizar la seguridad y el rendimiento del automóvil.
El acuerdo entre Pirelli y Bosch no solo busca mejorar la seguridad y el confort de los conductores, sino también contribuir a una mayor sostenibilidad en la industria automotriz. Los datos obtenidos por los sensores in-tyre podrán ser utilizados para mejorar el desgaste de los neumáticos, optimizando su rendimiento en diferentes condiciones climáticas y de terreno, lo que a su vez reduce el consumo de combustible y las emisiones de CO₂.
Esta alianza promete sentar las bases de un cambio significativo en la industria automotriz, donde los vehículos del futuro no solo serán más inteligentes, sino también más seguros y eficientes.