Después de una exhaustiva investigación en su sede de Milán, Pirelli emitió un comunicado explicando los motivos de la rotura de los neumáticos del neerlandés Max Verstappen (Red Bull) y el canadiense Lance Stroll (Aston Martin) en el Gran Premio de Azerbaiyán de Fórmula 1.
A ambos pilotos se les rompió el neumático trasero izquierdo. En el caso de Verstappen el daño se produjo cuando lideraban con comodidad y pocas vueltas de la caída de la bandera de cuadros en el circuito callejero de Bakú.
Pirelli dejó claro que las roturas no estuvieron relacionadas con un fallo en la producción, un excesivo desgasto o la delaminación. “Fueron causados por una rotura circunferencial en el flanco interior de los neumáticos”, descartando también que fuese por un corte causado por un elemento externo.
La empresa italiana explicó que los daños habrían sido causados por el “estado de funcionamiento del neumático”. Para sacar esa conclusión se revisaron todas las gomas utilizadas por otros coches en la carrera, “que tenían el mismo o mayor número de vueltas en comparación con los que se vieron dañados”.
“El proceso estableció que no hubo ningún defecto de producción o de calidad en ninguno de los neumáticos; tampoco hubo ningún signo de fatiga o delaminación. Las causas de los dos fallos de los neumáticos traseros izquierdos de los coches de Aston Martin y Red Bull han sido claramente identificadas. En cada caso, se debió a una rotura circunferencial en el flanco interior, que puede estar relacionada con las condiciones de rodaje del neumático, a pesar de haberse seguido los parámetros de inicio prescritos (presión mínima y temperatura máxima de la manta)”, se especificó.
“Como resultado de este análisis, Pirelli ha presentado su informe a la FIA y a los equipos. La FIA y Pirelli han acordado un nuevo conjunto de protocolos, incluyendo una directiva técnica actualizada que ya se ha distribuido, para controlar las condiciones de funcionamiento durante un fin de semana de carreras y considerarán cualquier otra acción apropiada”, se explicó.
Red Bull, por su parte, también emitió un comunicado descartando cualquier fallo en el coche y ratificando que respetan “los parámetros de los neumáticos de Pirelli en todo momento” y que continuarían “siguiendo sus directrices”.