Después de varias frustraciones, el argentino José María López anotó su nombre entre los ganadores de las 24 Horas de Le Mans al imponerse en la 89ª edición. Así se sacó la espina después del abandono en su debut en 2017, del segundo lugar que consiguió en 2018 y 2019 y del tercero de 2020.
Esta vez nada se interpuso entre López y sus compañeros, el inglés Mike Conway y el japonés Kamui Kobayashi, para conquistar la victoria en una de las pruebas más importantes del mundo.
Solo una falla en el sistema de combustible atentó contra el éxito, pero la eficacia de los ingenieros del Toyota GAZOO Racing y la pericia de los propios pilotos para realizar un protocolo de emergencia en plena carrera les permitió festejar a lo grande.
“Las últimas carreras de Le Mans fueron bastante duras para nosotros como equipo. Finalmente ganar esta competencia es un sueño hecho realidad. Es simplemente asombroso…”, admitió López, que con este resultado se convirtió en el segundo argentino en vencer en Le Mans después del éxito logrado por José Froilán González en 1954.
“Llegamos muy lejos durante esos años, pero recién ahora pudimos ganar Le Mans. Todas esas experiencias hacen que la victoria sea aún más especial”, reconoció el de Río Tercero sobre las frustraciones anteriores, que solo tuvieron cierto consuelo el año pasado al ganar el cetro.
“Mike y Kamui son como hermanos para mí y los he visto hacer cosas en el auto que son simplemente increíbles”, dijo sobre sus compañeros, con quien se alterna en la conducción del Toyota GR10 HYBRID N° 7 del TGR.
“Por supuesto, hay un equipo fuerte detrás de nosotros en Japón y Colonia. Nos llevamos la gloria, pero no podríamos hacerlo sin este equipo. Gracias a todos ellos”, reconoció.
Conway y Kobayashi también demostraron su felicidad. “Esta carrera nunca es fácil. Incluso si estás solo en el frente cualquier cosa puede pasar”, explicó el británico.
“Es una sensación increíble estar aquí como ganador de Le Mans. Tuvimos que pasar por muchas experiencias a lo largo de los años, algunas de ellas muy difíciles, para llegar aquí”, agregó en nipón, que tuvo el honor de recibir la bandera de cuadros.
