Con cinco títulos de Campeón del Mundo, once temporadas en MotoGP, 282 competencias disputadas y 31 años, Jorge Lorenzo estrena este 2019 con un nuevo reto en su carrera deportiva al incorporarse al equipo oficial Honda. A poco más de un mes para el inicio del Mundial (arranca el 10 de marzo en Qatar), el piloto mallorquín habló largo y tendido sobre esta nueva campaña en la que compartirá equipo con su compatriota Marc Márquez, nada menos que el vigente campeón de la especialidad.
-Año nuevo, nuevos colores… ¿Cómo te sientes?
-Personalmente, los colores en sí ya me gustan. Mis tonos favoritos siempre han sido el blanco, el rojo y el negro, y ahora se añadiría también el naranja. Son colores que representan éxito, muchísimas victorias y muchos campeonatos. Estoy muy orgulloso de pertenecer a esta familia y poder aportar mi granito de arena para que el equipo sea todavía más potente.
-¿Por qué decidiste marcharte de Ducati?
-Lo dí todo en Ducati, pero los resultados no llegaron. Me empecé a dar cuenta de que mi futuro podía ser muy complicado y en ese momento volví a sentir el amor por competir y ganar. Decidí darlo todo para seguir en este deporte y hablé directamente con Honda. Al principio no fue fácil, pero luego llegó la oportunidad y fue un gran momento.
-¿Qué significa pertenecer al equipo Repsol Honda?
-Si hablamos del Repsol Honda, posiblemente sea el equipo más laureado de la historia. El que tiene más victorias y campeonatos. Quizás sea, por compararlo a un equipo de fútbol, como un Barça o Real Madrid. No hay un equipo con más títulos y mayor importancia a nivel mundial que este.
-¿Cuáles fueron tus sensaciones la primera vez que probaste tu nueva moto?
-Venía de una moto completamente diferente, la Ducati es muy grande y muy alta, quizás demasiado grande para mi estatura. La Honda, en cuanto a dimensiones, me viene mejor. Es una moto más compacta, más pequeña y baja, con la que llego mejor al suelo. Me sentí un poco más seguro a la hora de entrar en las curvas, porque cuanto más cerca del suelo estás, más confianza tienes. La primera impresión fue positiva y vi mucho potencial.
-Cuando te bajaste de la Honda por primera vez, lo hiciste con una gran sonrisa. ¿Qué pensabas?
-En esos momentos, no puedes engañar, tu rostro habla por sí solo. Es todo muy emocionante, muy nuevo y lo disfrutas mucho. Y además, si las sensaciones son buenas, todavía se percibe más en tu expresión.
-De los entrenamientos de Valencia a los de Jerez, ya probaste algunas modificaciones en tu moto. ¿Cómo resultaron?
-Una de las cosas que más me impresionó fue esa capacidad de reacción que tiene el equipo para darte lo que pides. Lo tenía bastante claro, Honda tomó nota de todas mis indicaciones y en pocos días lo tuvieron todo preparado y tuvimos un depósito casi al cien por cien a mi gusto.
-Has dicho que ibas a aprender de Marc Márquez, pero que él también lo haría de ti. ¿Qué crees que te puede aportar Marc y qué le puedes aportar tú a él?
-Todos los pilotos tenemos nuestros puntos fuertes y nuestros puntos débiles. Marc también los tiene. Yo intentaré aprender de sus fortalezas como él también supongo que intentará aprender de las mías. De esta forma nos empujaremos el uno al otro; yo querré batirle y el querrá batirme a mí, y eso siempre hace crecer el nivel del equipo y ayuda a aportar nuevos aspectos técnicos a la moto.
-Mucho se habla de la rivalidad que habrá con Márquez, ¿qué puedes decir sobre eso?
-Mi situación es bastante similar a 2008 cuando llegué a Yamaha y Valentino (Rossi) estaba en el pico de su carrera conociendo muy bien la moto. Ahora vengo a un equipo nuevo con el actual campeón y que conoce muy bien la moto. Marc es un fenómeno y tengo muchas cosas que aprender de él. Vengo con mucho orgullo, pero también con humildad para aprender y poco a poco ir consiguiendo los resultados que deseo. Pero la gente saca muchas cosas negativas de que haya dos gallos en un gallinero, por lo que voy viendo en la prensa, pero es mucho más lo positivo que eso puede aportar. Tener dos pilotos campeones siempre hace crecer el nivel de equipo, que está siempre por encima de los pilotos. En la Fórmula 1 había mucha rivalidad entre Prost y Senna y cuando Prost se retiró, Senna dijo que lo echaba de menos. Es una relación amor-odio que te hace mejorar.