En el marco de renovar una vez más su apuesta por el país y de continuar su involucramiento hacia una producción más sustentable, Mercedes-Benz Argentina anunció convirtió la producción local en CO2 neutral utilizando el 100% de la energía eléctrica procedente de fuentes renovables (energía solar, eólica e hidroeléctrica). El resto de las energías utilizadas en la producción del utilitario Sprinter se compensan a través de Certificados de Reducción de Emisiones (CERs).
“Nuestra empresa tiene una hoja de ruta clara que hoy se está materializando en lograr la neutralidad de carbono en cuanto a la energía que utilizamos para la producción. A esto se agrega la inauguración del primer proyecto de autogeneración de energía que incluye la adquisición y colocación de paneles solares en el Centro Industrial que abastecen al 100% la energía de la zona de ingreso a la planta”, afirmó Verónica Niemann, Gerente de Asuntos Públicos, Comunicaciones y Sustentabilidad de Mercedes-Benz Argentina.
Durante más de siete décadas, Mercedes-Benz Argentina ha fabricado y comercializado todo tipo vehículos. Del Centro Industrial Juan Manuel Fangio sale actualmente la Sprinter, que además de nutrir al mercado interno se exporta a varios países de la región y al exigente mercado de Estados Unidos.
A nivel global Mercedes-Benz Group lleva adelante un programa llamado Green Production que se desarrolla en todas las Plantas de Vans y autos de Mercedes-Benz en el mundo y que hace foco en la eficientización del uso de la energía, del agua y del tratamiento de los residuos. Mercedes-Benz Argentina se suma así al resto de las plantas de Mercedes-Benz Group que ya son CO2 neutrales.
Las metas están alineadas a la estrategia global Ambition 2039, que busca preservar los recursos junto con la protección climática y la calidad del aire de todas sus operaciones. Tiene además como objetivo que las nuevas plataformas desarrolladas a partir de 2025 sean exclusivamente de vehículos eléctricos, lo cual representa un cambio tecnológico significativo. En ese sentido, se espera que para 2030, el 50% de las ventas correspondan a vehículos eléctricos o híbridos.