Los grandes no mueren nunca. Una muestra de esa afirmación ocurrió durante la edición de 2008 del Rally de la Argentina con la gran cantidad de recuerdos y homenajes a Jorge Raúl Recalde al cumplirse 20 años del histórico triunfo que consiguió en la fecha mundialista realizada en su Córdoba natal.
El equipo italiano Top Run, para el cual corrió el cordobés, rememoró su victoria a través de una calcomanía en sus autos. Mientras que la marca de fernet 1882 fue un poco más allá: colocó 1.882 siluetas de Recalde en escala real en la zona de Copina. La oportunidad también fue aprovechada por el colega Miguel Ángel Motta para presentar un libro que repasa la vida y obra del Caballo de Lona a través de anécdotas. Bajo el título “Pa’ Recalde” recopila vivencias del propio autor, de la familia del piloto y de los navegantes Jorge Del Buono y Martín Christie, entre otros.
“Cuando Jorge murió me propuse hacer algo en su honor que realmente me costara. Yo siempre hice radio y televisión, así que escribir un libro fue un desafío. A las 48 horas de enterarme de su fallecimiento me puse a escribirlo. Bety, la mamá de Jorge, se enteró de este proyecto y me metió presión. ‘Dale, terminá el libro de mi hijo’, me decía cada vez que nos veíamos”, dijo Motta.
La tapa del libro es una imagen de Recalde realizada por Alberto Cognini, el creador de la revista cordobesa de humor “Hortensia”, donde se aprecia el rostro del piloto detrás de un volante. La historia dice que en aquel 1988, Recalde estaba peleando por el campeonato del Grupo N y que desistió de usar un auto de producción en el Rally de la Argentina para subirse a un Grupo A y tener la oportunidad de ganar.
“En mi opinión, eso fue determinante para que no fuera campeón en el Grupo N. Quería tanto ganar esta carrera, que prefirió subirse a un auto de la clase mayor”, recordó el italiano Marco Giordo, quien vivió de cerca la campaña del argentino en el Mundial. Si bien Giordo tiene razón en su apreciación, bien vale destacar que el cordobés perdió el cetro por no querer firmar una denuncia para que excluyeran del RAC al belga Gregorie de Mevius, que había ganado la carrera.
“La gente del equipo vino y le dijo que tres de los comisarios lo querían echar, pero que los otros tres no. Entonces si él firmaba la denuncia, los comisarios excluían a de Mevius y así era campeón. Jorge los miró y les dijo que así no le gustaba ganar. Jorge era así”, rememoró Del Buono, que lo acompañó en la butaca derecha en aquella carrera del Rally de la Argentina.
Sin dudas, Jorge Recalde está presente en el recuerdo de aquellos que lo conocieron personalmente y de quienes lo admiraron a la distancia. Por eso siempre seguirá vivo.
