Después de cuatro meses, Agustín Canapino volvió a acelerar un auto de IndyCar en el circuito de Homestead durante el inicio de las pruebas de pretemporada de la categoría estadounidense. El Titán quedó quinto a un segundo de la punta con el Dallara-Chevrolet del Juncos Hellinger Racing.
Los tests en la pista ubicada en Miami se extenderán hasta este miércoles. El equipo de Ricardo Juncos y Brad Hollinger solo llevó un auto: el N° 77 que este año será conducido por el francés Romain Grosjean.
Para que ambos pilotos puedan aprovechar al máximo los ensayos, Canapino giró todo el lunes y también lo hará en el primer turno de este martes. Mientras que Grosjean, que reemplaza al británico Callum Ilott, se subirá en la tarde de hoy y rodará también en la última jornada.
“Estoy muy contento de subirme de nuevo al IndyCar. Fue un muy buen día para nosotros”, explicó Canapino, que marcó en la mejor de sus 49 vueltas 1m12s248.
“Pudimos quedar quintos a un segundo, por delante de pilotos y equipos muy buenos. Por eso estoy muy contento con el primer día del año. Empezamos motivados…”, agregó el múltiple campeón argentino.
El campeonato 2023 de IndyCar comenzará en el callejero de San Petersburgo, el 10 de marzo.