Franco Colapinto ha captado la atención del paddock de Fórmula 1 tras su temporada debut. Si bien su talento lo perfila como una de las grandes promesas, su futuro inmediato depende de factores tan diversos como los resultados en las últimas carreras de 2024, el interés de Red Bull, y las altas exigencias del equipo Williams, que tiene contrato con él.
Jamie Campbell-Walter, representante de Colapinto, compartió con el periodista Adam Cooper de Motor Sport detalles exclusivos sobre las oportunidades y desafíos que enfrenta el joven piloto que este fin de semana participará en el Gran Premio de Qatar con el objetivo de mantener sus “acciones en alza” en el competitivo mundo de la F.1.
LA PRESIÓN DE UN DEBUT EN LA ÉLITE
Colapinto ha tenido momentos brillantes desde su debut en la F.1 y no ha tenido problemas en estar casi al mismo nivel que su compañero Alex Albon, con más de un centenar de carreras de experiencia. Pero también ha cometido errores que han costado caro, como los dos accidentes que tuvo durante el GP de San Pablo y el de Las Vegas, que obligó a los mecánicos de Williams a alistar un nuevo auto a partir del chasis de repuesto. En este último caso, recompensó ese esfuerzo con el 14° lugar después de largar desde boxes.
“Franco estaba en su sexto fin de semana de carrera, nunca había conducido bajo la lluvia y todas esas cosas pueden pasar. Y ese día le pasó a Alonso, le pasó a Sainz, le pasó a Alex (Albon). No es que fuera el único. Creo que el Williams no era muy fácil de conducir, porque mira el hecho de que ambos se estrellaron…”, explicó el manager sobre lo ocurrido en Interlagos.
No obstante, el accidente en Las Vegas marcó una diferencia, pues ocurrió en un contexto donde los recursos de Williams ya estaban al límite, lo que impactó tanto al equipo como al propio piloto: “Fue una tontería producto de la presión de no saber cuál es su futuro, que a veces es peor que saberlo”, agregó Campbell-Walter.
¿QUÉ NECESITA PARA CONVENCER A RED BULL?
Christian Horner y Helmut Marko, los principales decisores en Red Bull, están analizando opciones para el asiento junto a Max Verstappen en 2025, pese a que Sergio Pérez insiste en que ese puesto es le pertenece. Liam Lawson y Yuki Tsunoda, actualmente en Racing Bulls, son contendientes, pero el talento de Colapinto, combinado con su capacidad de atraer a una audiencia global —en especial de Latinoamérica—, lo convierten en una opción interesante.
Según Campbell-Walter, Colapinto ha enfrentado obstáculos que otros pilotos no han tenido, como la falta de presupuesto para pruebas: “Kimi Antonelli está haciendo pruebas todas las semanas. Williams no tiene coche de pruebas TPC (2022). Franco solo hizo la prueba de pilotos jóvenes el año pasado y la FP1 en Silverstone. Así que no tiene mucha experiencia. Nunca ha hecho muchas pruebas como piloto, porque nunca tuvimos el presupuesto. Y también tiene la presión de una nación sobre sus hombros. No puedo imaginarme cómo es eso, y no creo que mucha gente pueda. Y es muy fácil criticar desde fuera”, sostuvo el Campbell-Walter.
Con dos fines de semana restantes en el calendario, las actuaciones de Colapinto serán clave para determinar su destino. Su sólida remontada desde el pit lane en Las Vegas, terminando cerca de Sergio Pérez, fue una demostración de carácter que Red Bull seguramente tendrá en cuenta.
Sin embargo, el interés de Red Bull requeriría una negociación financiera con Williams, algo que Jamie Campbell-Walter considera justo: “Por el momento, tenemos un contrato a largo plazo con Williams. Hay interés. Yo diría que antes del accidente en la clasificación, todo parecía ir bien. Hay muchas posibilidades de que lo veamos en la parrilla el año que viene, pero creo que hay gente que quiere ver cómo le va en las próximas carreras, lo cual es justo. Tienen muchos pilotos, así que no hay prisa…”
Franco Colapinto tiene los ingredientes necesarios para convertirse en un piloto top de Fórmula 1, pero su camino está lleno de desafíos. Red Bull, con su tradición de apostar por jóvenes talentos, podría darle la oportunidad de su vida, siempre que las piezas encajen tanto en la pista como fuera de ella.