El primer día de actividad del Gran Premio de Austria de Fórmula 1 había terminado con la denuncia realizada por Red Bull Racing contra Mercedes por la supuesta ilegalidad del sistema de dirección de doble eje (DAS, por sus siglas en inglés) que le permite a los pilotos del team alemán cambiar la convergencia de los neumáticos. Y el sábado comenzó con el OK del dispositivo por parte de los comisarios de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), que desestimaron la protesta de la escudería austríaca…
Tras una audiencia de delegados a la que asistieron los miembros de ambos equipos, así como el miembro del Departamento Técnico de la FIA, Nikolas Tombazis, se determinó que el DAS “es parte del sistema de dirección del Mercedes W11”, por lo que la escudería alemana no infringe ninguna normativa relacionada con la suspensión.
“El DAS sería ilegal si no fuera parte del sistema de dirección. Por lo tanto, el principal debate debe ser si puede considerarse parte del sistema de dirección, y los comisarios deciden que sí lo es. En consecuencia, los comisarios consideran que el DAS es una parte legítima del sistema de dirección y, por lo tanto, cumple con las regulaciones relevantes con respecto a la suspensión o la influencia aerodinámica”, apunta el comunicado de la FIA.
En su protesta de Red Bull alegó que el DAS violaba el reglamento técnico, concretamente el artículo 3.8, que se refiere a la influencia aerodinámica, y el artículo 10.2.3, que establece que “no se puede hacer ningún ajuste a ningún sistema de suspensión mientras el automóvil está en movimiento”.
Mercedes usó por primera vez este sistema, que estará prohibido a partir de 2021, en los test de pretemporada en febrero. Se cree que el DAS permite que los neumáticos se calienten de manera más uniforme en las rectas, lo que reduce el desgaste y ayuda al agarre, al tiempo que permite la máxima estabilidad en la entrada de las curvas.