Ford encontró una forma inteligente de reutilizar millones de botellas de plástico. Cada unidad de EcoSport que la compañía fabrica está equipada con alfombras hechas con 470 botellas de plástico de un solo uso.
Desde que Ford lanzó el EcoSport a nivel mundial en 2012 ha dado una nueva vida a más de 650 millones de botellas de 500 mililitros con un peso estimado de 8.262 toneladas métricas y que, si se colocan una delante de la otra, darían dos vueltas alrededor del mundo.
Desde que usó por primera vez plástico reciclado en el Mondeo hace más de 20 años, Ford ha pasado a reciclar en la actualidad 1.200 millones de botellas al año en todo el mundo.
Convertir el plástico en alfombras de coche implica primero triturar las botellas y sus tapas hasta convertirlas diminutas escamas. Luego se calientan a 260°C y se funden antes de formar fibras del ancho de un cabello humano. Estas fibras se convierten en un hilo y es con este material con el que se tejen las alfombrillas. ¡Bravo!