Ferrari comenzó a producir válvulas de respiración y accesorios para máscaras protectoras en su planta de Maranello, a través de impresoras 3D y en las instalaciones donde desarrollan sus monoplazas de Fórmula 1, en apoyo a los sanitarios que tratan a pacientes con coronavirus en Italia.
“El departamento donde generalmente se construyen los prototipos de automóviles está produciendo estos componentes termoplásticos utilizando tecnología de fabricación aditiva”, explicó Ferrari en un comunicado.
Algunas de las válvulas se desarrollan para Mares, fabricante de equipos de buceo, y se ajustan a sus máscaras de buceo para crear unas nuevas de emergencia que ayuden a los pacientes que sufren de insuficiencia respiratoria y necesitan máquinas respiratorias.
La fábrica automovilística italiana también suministra otros accesorios a Solid Energy, que los usará para transformar las máscaras de snorkel de la marca Decathlon en ayudas para proteger a los sanitarios expuestos a infecciones.
En los próximos días, Ferrari planea fabricar varios cientos de equipos que serán distribuidos, en coordinación con Protección Civil italiana, en varios hospitales italianos, incluidos los de Bérgamo, Génova, Módena y Sassuolo y los trabajadores de la salud en la Ciudad de Medicina, cerca de Bolonia.
