Citroën es una marca diferente que a lo largo de su historia ha roto paradigmas e inaugurado nuevas formas de entender el automóvil. El objetivo ha sido siempre y sigue siendo hoy facilitar la vida a las personas, ofreciéndoles soluciones útiles de movilidad adaptadas a sus necesidades. Una filosofía que el Citroën C4 Cactus encarna hoy y que se puede ver en los históricos Citroën que acoge bajo su techo el Conservatorio de la marca, a las afueras de París. Un espacio en el que se encuentran todos los vehículos de Citroën que han marcado época: desde el Tracción Delantera, hasta el Méhari, pasando por el 2CV o el GS, entre otros.
El Conservatorio Citroën alberga más de 400 piezas, lo que lo convierte en la mayor colección internacional de Citroën en todo el mundo. Este centro de conservación es un auténtico museo de la historia de Citroën que alberga, además de los modelos, más de un kilómetro de estanterías de documentación recopilada a lo largo de los años: registros de matriculación, bocetos y planos de las oficinas de estudios Citroën, carteles, catálogos, boletines de información y revistas, dossieres de prensa, documentos técnicos, etc. Lo que lo convierte también en el mayor centro documental de Citroën en el mundo.
Los vehículos, entre los que también se pueden ver los concepts que han ido marcando las líneas de los futuros modelos, están organizados por grupos, para poder observar con mayor facilidad la evolución de la marca a través de la historia.
PREVIOS A LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL: Auténticos testigos y actores del nacimiento de Citroën. Del Tipo A al Tracción Delantera, pasando por el B10, el C4, el C6 o también el Rosalie. Un viaje en el tiempo para redescubrir las tecnologías y las innovaciones de la época.
DE POSGUERRA: El Conservatorio, que posee los primeros modelos producidos por André Citroën, guarda numerosos vehículos de la posguerra de los que algunos se mantienen en la memoria colectiva: el 2 CV, el innovador GS y los vehículos más recientes en sus versiones más sorprendentes.
COMERCIALES: Uno de los pilares de la marca en la actualidad y a lo largo de la historia. Entre las piezas únicas que se pueden hallar en el Conservatorio destaca el último ejemplar fabricado del Tipo H, el célebre furgón construido en chapa con nervaduras, que se ha convertido en un icono del fenómeno de los ‘Food Truck’. Su diseño único, su versatilidad y sus capacidades de transformación lo hicieron omnipresente en las carreteras y las calles de toda Europa durante sus más de 35 años de vida comercial. Ahora, estos son sus puntos fuertes para ser el abanderado de la revolución de los restaurantes sobre ruedas. Se dejó de fabricar en 1981, cerrando la producción de este modelo, que se inició en 1947.
DEPORTE Y AVENTURA: La aventura y el deporte constituyen un elemento esencial de la identidad de Citroën. En el Conservatorio es posible recordar el 2 CV Cross o arrancar un ZX del rallye-raid París-Moscú-Pekín 1992 e incluso llegar más lejos y subir a uno de los C4 Autocadenas protagonistas de históricas aventuras como fueron los famosos Cruceros Negro y Amarillo de Citroën. Con el primero de ellos, del 28 de octubre de 1924 al 26 de junio de 1925, Citroën recorre de norte a sur todo el continente africano. Cinco años después, arrancó el Crucero Amarillo, con el que Citroën afrontó la travesía del continente asiático, desde Beirut hasta Pekín.
LOS INSÓLITOS: El Conservatorio Citroën posee también vehículos insólitos, ya sea por su historia o por sus detalles específicos, como el Tipo J, con el que Citroën ha dejado su huella en las ruedas de chevrones de los tractores. O un helicóptero biplaza, desarrollado por la marca en los años 70 como alternativa a los atascos.
PRESENTE Y FUTURO: Hoy, es el Citroën C4 Cactus el que ha inaugurado una nueva era en el automóvil, ofreciendo sólo aquello que realmente les importa a las personas, con más diseño, más confort y más tecnología útil, al servicio del bienestar. El C4 Cactus es el primer modelo de una nueva generación de Citroën dispuestos a conquistar el mercado y a dejar huella en nuestra época. Prueba de ello son los SpaceTourer y Nuevo Jumpy, vehículos comerciales que ofrecen una solución moderna y adaptada a los nuevos tiempos que permite responder a las necesidades tanto de las familias modernas como de los profesionales. O el Citroën E-Mehari, un guiño al icónico Méhari, 100% eléctrico y con un diseño colorista y divertido.