Como era de esperarse, el italiano Andrea Iannone quedó impactado con la decisión del Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) de llevar su suspensión en el MotoGP de 18 meses a cuatro años después de considerar que el consumo de un esteroide anabolizante que determinó un doping positivo no fue accidental como él lo había manifestado en su apelación.
“Hoy sufrí la mayor injusticia que se puede recibir. Me han arrancado el corazón separándome de mi gran amor. Las razones carecen de sentido lógico y con hechos erróneos. Para ello habrá un lugar y un momento adecuado… porque ciertamente no me doy por vencido. Sabía que me enfrentaba a fuertes poderes, pero tenía esperanzas, esperaba la honestidad intelectual y la afirmación de la justicia”, explicó Iannone en sus redes sociales.
“En este momento sufro como jamás podría hacerlo. Pero quien trató de destruir mi vida comprenderá cuánta fuerza tengo en mi corazón. El poder de la inocencia y sobre todo… una conciencia tranquila. Una sentencia puede cambiar los acontecimientos, pero no al hombre”, culminó el italiano, que cumplirá con su sanción a fines de 2023.
Tras conocerse la noticia, Aprilia, su escudería, también se pronunció al respecto. “Las sentencias están para ser respetadas y aceptadas, aunque muchos elementos de esta decisión son desconcertantes, incluso desde un punto de vista puramente científico. No nos arrepentimos de haber permanecido cerca de Andrea y, de hecho, estamos cerca de él incluso ahora”, explicó Massimo Rivola, CEO de Aprilia Racing.
“Este asunto, con sus largos periodos de tiempos, ha perjudicado gravemente a Aprilia y a nuestras estrategias para ésta y las próximas temporadas, pero ahora debemos mirar hacia delante y tenemos el deber de encontrar rápidamente una solución de alto nivel, que case con el proyecto iniciado con Andrea y que nos permita continuar nuestro crecimiento, que está ahí y es evidente”, agregó el team-manager.
