Hace menos de dos semanas el Súper TC2000, categoría emblema del automovilismo argentino, comenzó una nueva etapa. Dejó de pertenecer al Grupo Clarín y pasó a manos de Tango Sports Team, la empresa de los hermanos Alejandro y Diego Levy, quienes también son propietarios del Top Race y al CarX).
El cambio de mando llegó en un momento crítico para el Súper. Tiene solo a Chevrolet y Toyota como equipos oficiales y a otras dos estructuras respaldas por petroleras como Puma Energy y Axion Energy. Tan delicada está la situación es que si hoy el torneo tuviese que arrancar habría solo 16 autos, algo que motivó a retrasar el inicio del certamen en varias semanas para tratar de conseguir más unidades.
Todo producto de una mala gestión de Autosports, la unidad de negocio del holding mediático que pese a sus esfuerzos no logró mantener el camino que había emprendido Pablo Peón cuando estaba al frente de la empresa.
Alejandro Levy sabe que tiene en sus manos un “fierro caliente”, como se dice; aunque no duda en que con trabajo y paciencia la categoría puede recuperar el brillo de antaño. Eso lo dejó bien claro en este mano a mano que tuvo con Automundo.
-¿Qué análisis hacés de la actualidad del Súper TC2000? ¿Cómo lo encontraste y en qué van a trabajar para mejorarla?
-Hoy el Súper TC2000 está cuestionado, tenemos que ser realistas. Tenemos que trabajar en mejorar la imagen, en demostrarles a los pilotos, a los equipos y a las marcas que la categoría sigue estando, que sigue siendo muy profesional y muy competitiva. Agradecerles, por supuesto, a las marcas que siguen confiando y a los equipos que siguen confiando e invitar a aquellos que no son parte a que puedan estar en esta gran categoría con gran historia en el automovilismo argentino.
-Hay muchos fanáticos que piden que la categoría vuelva a su esencia, que por ejemplo cada marca tenga su propio motor. ¿Qué les dirías a esas personas?
-Les diría que nosotros vamos a analizar, vamos a escuchar y vamos a tratar de consensuar con los equipos, con los pilotos y con la gente, que es lo que entendemos que podría llegar a ser lo mejor para el desarrollo de la categoría… Tenemos que entender que es una categoría muy profesional. Es una categoría que es muy mirada y que al ser tan mirada también es más cuestionada que otras. Pero que son modas también. En determinado momento la moda fue el motor de cada marca, después la moda -o la circunstancia- hizo que sea monomarca, acá y en el mundo. Hoy la tendencia es que cada marca corra con su propia mecánica, como sucede con el TCR. Entonces, por qué no pensar en que en un futuro cercano cada marca cuente con su propia motorización. Es posible. Es cuestión de analizarlo, de plantearlo ante los distintos jugadores que son las terminales, los equipos y la CDA. En el caso que logremos un consenso. Nosotros administraremos y gerenciaremos ese cambio.
-Seguramente, este año será de transición, ¿pero cómo te imaginas el 2022 y qué esperas del futuro?
-Lo primero que le pido al aficionado, al fanático, es que nos tenga un poquito de paciencia porque el campeonato ya está casi arrancando. Vamos a hacer los cambios que consideremos que se pueden hacer en poco tiempo, vamos a preocuparnos por el espectáculo y por sostener a la categoría. Para nosotros es trascendental trasmitir que aquellos que forman parte de la categoría estén convencidos que están donde quieren estar y que están en una de las mejores categorías del país. Nosotros tenemos la obligación de sostener y de volver a hacer tan prestigiosa a la categoría como lo fue durante tantos años. Y ese es nuestro principal objetivo. El 2022, como dijiste, será un año de transición, pero también de planificación. Será un año donde vamos a estudiar, a trabajar y armar una estrategia para el 2023, 2024 y 2025. Creemos -y estamos convencidos- de que hay que volver a posicionar a esta categoría en lo más alto del automovilismo argentino.
-Dentro de ese posicionamiento está volver a utilizar el nombre TC2000…
-Queremos volver a la esencia de la categoría, que es el nombre unificado de TC2000 como categoría madre, como categoría insignia. Pero esto lo tenemos que consensuar y trabajar con la CDA y con la televisación, que tienen contratos firmados. Acá vamos a buscar el diálogo, vamos a buscar el consenso y vamos a buscar el bien mejor para todos. Estamos con ese objetivo. Lo principal es que tenemos muchas ganas de trabajar en estas tan lindas categorías como la Fórmula 2.0, que para nosotros es estratégica porque es donde nacen y se forman los pilotos. Y después está el TC2000, que es el paso obligado para llegar a lo máximo, lo que hoy conocemos como Súper TC2000. Por otro lado también tenemos al Top Race, que también es una gran categoría que demostró tener una alta competitividad y grandes deportistas, con pilotos que han sorprendido por su capacidad y que van a seguir sorprendiendo durante todos estos años. Tenemos que buscar un mix y por qué no, la mezcla entre pilotos y equipos, entre unas y otras.