El francés Sébastien Ogier y su copiloto Julien Ingrassia regresarán a Citroën, equipo con el debutaron en el Mundial de Rally, para competir en las temporadas 2019 y 2020.
“Varios elementos contaron en mi elección. Encontré muy bonita la idea de reencontrar la gente con la que había trabajado bien hace algunos años y también la perspectiva del desafío de intentar ser campeón del mundo con un tercer constructor diferente”, explicó el cinco veces monarca de la especialidad de manera consecutiva desde 2013.
Solo el finlandés Juha Kankkunen, ganador en 1986 con Peugeot, en 1987 y 1991 con Lancia y en 1993 con Toyota, ha alcanzado este hito.
Ogier, de 34 años, corrió para Citroën entre 2008 y 2011, cuando la relación con el líder del equipo, su compatriota Sébastien Loeb, se convirtió en insoportable. Fichó para Volkswagen y ganó sus primeros cuatro títulos entre 2013 y 2016. Tras la decisión de la marca alemana de dejar la categoría Seb desembarcó en M-Sport Ford en 2017, año de su quinta corona mundial.
Hace un mes Ogier dijo que quería firmar un último contrato en el WRC antes de dedicarse a su familia. Esta temporada marcha tercero en el torneo a 23 puntos del líder belga Thierry Neuville (Hyundai) cuando quedan tres pruebas por disputarse.