De todos los campeonatos mundiales que existen en la actualidad, el del WRC es el que tiene menos marcas involucradas. Solo Toyota y Hyundai cuentan con estructuras oficiales, mientras que Ford tiene una presencia semioficial a través de M-Sport. Pero esto podría cambiar en un futuro cercano gracias al nuevo rumbo que ha tomado la especialidad este año a través de los Rally1 híbridos.
Con esta modificación técnica el Rally Mundial ha demostrado su intención de convertirse en una categoría sostenible en sintonía con el rumbo que ha tomado la industria automotriz.
Es por eso que algunas compañías que hoy no están presentes en la especialidad han comenzado a analizar una posible incursión en la misma. La lista la encabeza Alpine y Opel, que en diferentes momentos han estado en la categoría.
La marca francesa, que pertenece al Grupo Renault, ha estado participando en algunas reuniones del WRC y se ha mostrado muy interesada en regresar a la división en la que brilló en los ’70. Sin embargo, esto recién se evaluaría cuando el WRC decida ser totalmente eléctrico.
Eso misma postura tendría Opel, propiedad del Grupo Stellantis y que en la actualidad tiene una categoría de rally eléctrica en Alemania basada en el Opel Corsa E.
Por lo pronto, el WRC aspira a mantener a la categoría híbrida hasta fines 2025, por lo que cualquier modificación técnica debería ponerse en práctica recién en 2026.
No obstante la Federación Internacional del Automóvil ya le dio el OK a la clase FIA Rally5e totalmente eléctrica y que estará basada en vehículos cero emisiones sin demasiada preparación.