Volkswagen presenta el ID. BUGGY en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra. Se trata de un vehículo de alta tecnología y libre de emisiones para el verano, ya sea en la playa o en la ciudad, basado en la plataforma modular de propulsión eléctrica (MEB).
Los paralelismos entre los buggies californianos de los años 60 y el nuevo ID. BUGGY son aparentes. Todos aquellos buggies de playa tenían un alto grado de variabilidad modular, basada en el chasis del legendario Beetle, con un motor boxer de cuatro cilindros montado en la parte trasera.
Fabricantes de series más reducidas extendieron una cubierta hecha de plástico reforzado con fibra de vidrio (GFRP) encima del chasis y el motor del Beetle, escribiendo así una página en la historia de la automoción. El ID. BUGGY está ligado a este concepto de culto con las posibilidades de la era moderna. Aquí, la base es el chasis progresivo de la plataforma MEB.
La batería, que se encuentra integrada en el suelo del vehículo, es recargable de iones de litio y suministra la electricidad al motor eléctrico trasero de 150 kW (204 CV). Se podría lograr una tracción a las cuatro ruedas con un “árbol cardán eléctrico” gracias a un motor eléctrico adicional en el eje delantero.
El lenguaje de diseño claro expresa la experiencia única que supone conducir un buggy. Para poder sentir el viento, se prescindió deliberadamente de techo y puertas fijas. Por esta razón, el diseño robusto y minimalista del interior se caracteriza por los materiales impermeables. El prototipo es un biplaza, aunque también se puede convertir para ofrecer 2+2 plazas.
La carrocería compuesta está fabricada con una mezcla de aluminio, acero y plásticos, y es independiente. Gracias a la estructura modular, la zona de la carrocería superior se puede separar del chasis MEB.
Esta es una clara señal hacia fabricantes de series más reducidas y start-ups ya que esta plataforma tiene el potencial de convertirse en una nueva base técnica para la movilidad eléctrica.