Este fin de semana, el Turismo Carretera se prepara para disputar la segunda fecha de la temporada en el autódromo de Viedma, una cita que estuvo en duda hasta el último momento debido a la falta de apoyo provincial para llevar a cabo el evento. Sin embargo, gracias a un cambio de enfoque de la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC) en el financiamiento de los eventos, la competencia se llevará a cabo.
El 2024 presenta desafíos significativos para el TC, especialmente en el aspecto económico. El ajuste propuesto por el gobierno nacional ha llevado a las provincias visitadas por la popular categoría a realizar recortes presupuestarios, lo que ha afectado la planificación del calendario teceísta. Tal es así que las siete primeras fechas tienen escenarios confirmados -por decirlo de algún modo- mientras que el resto tiene sus casilleros en blanco.
Inicialmente, la ACTC había establecido para este año un canon que superaba los 150 millones de pesos por fecha. Vale aclarar que a esa cifra los clubes debían sumarles una cantidad similar para solventar sus propios gastos derivados de obras, seguridad, energía eléctrica e impuestos.
Sin embargo, la ausencia del apoyo provincial llevó a la entidad presidida por Hugo Mazzacane a reformular la estrategia, optando por quedarse con el valor de las entradas en lugar de asegurarse una cifra fija. Sin dudas, todo un desafío ya que el dinero recaudado dependerá de la cantidad de espectadores…
Este cambio representa un giro significativo en la forma en que se financia el TC, y Viedma será la primera prueba de este nuevo enfoque.
Augusto Rochet, miembro de la Comisión Normalizadora del Auto Moto Club de Viedma, explicó oportunamente la situación: “Cuando nos pasaron el canon a abonar para que venga el TC, dijimos que iba a ser imposible por el momento en el que estábamos. Nos negamos a hacer la fecha, pero ellos optaron por hacerla igualmente y quedarse con el valor de las entradas, algo que nunca antes había pasado”.
“En lugar de pagar un canon, esa será la forma en la que venga el TC este año. Por suerte, vienen igual y nos vemos beneficiados con eso. Si perdés la plaza de una fecha en el calendario, por ahí no sabés cuándo la podés volver a recuperar. El traerla todos los años nos permite esto”, agregó el directivo.
Según el propio Rochet, con unos 15.000 espectadores el saldo será positivo para la ACTC. De ahí el costo de las entradas: 15.000 pesos las generales y 30.000 pesos el acceso a boxes.
Si este “experimento” en Viedma tiene éxito, sería el esquema que le permitiría a la ACTC enfrenar una época en la que todos saben que “no hay plata”.