A la espera de un resultado negativo en su test de COVID-19 que le permita correr el fin de semana en el GP de Europa de MotoGP que se realizará en el circuito español de Valencia, el italiano Valentino Rossi brindó algunos detalles de cómo fueron sus días como paciente con coronavirus.
Rossi se hizo un nuevo test el pasado martes y volvió a dar positivo. El jueves se realizó otro y dio negativo, algo que le permite viajar a Valencia. Cuando llegue al circuito deberá realizarse otro PCR más y solo un nuevo resultado negativo le permitirá correr.
“Este virus es muy complicado y serio. Me sentí mal durante dos días. Después de eso volví a estar completamente en forma, al 100%. Me aislé en casa todo el tiempo y seguí de cerca los consejos médicos. Es una situación muy triste y difícil, pero así es”, apuntó Rossi, que dio el primer positivo el pasado 15 de octubre.
Esta situación le impidió al Doctor participar en las dos últimas carreras realizadas en Aragón (España) y aunque esta semana volvió a dar positivo en la previa de la 13ª fecha del certamen, no pierde la esperanza de revertir la situación.
“Por suerte todavía tengo dos oportunidades más de volver a la pista el viernes o el sábado. Estoy muy triste porque me siento bien y no veo la hora de volver a bordo de mi M1 y reunirme con mi equipo. Realmente espero que el próximo resultado de la prueba de PCR sea negativo”, agregó.
Por cualquier eventualidad, Yamaha ya designó al estadounidense Garrett Gerloff, piloto de la marca en el Mundial de Superbike, como eventual reemplazante del múltiple campeón…