El Autódromo de Buenos Aires fue el lugar elegido por Volvo Trucks para presentar su nueva Tecnología de Consumo Inteligente (TCI) y, de paso, exhibir con orgullo una de sus joyas: el Iron Knight, un tremendo camión de competición equipado con un motor de 2.400 caballos de potencia que ostenta dos récords mundiales de velocidad en 1.000 metros y 500 metros.
En la primera parte del evento se dieron detalles del TCI, que la marca introduce al mercado regional en el tren motriz en los motores de 13 litros de la línea F.
Para reducir el consumo se evolucionó el motor con un diseño de turbo más eficiente. Además, se utilizaron nuevas camisas y aros con materiales que reducen la fricción interna y se mejoró el software que permite optimizar el consumo.
Esta tecnología se complementa con un nuevo sistema de Aceleración Inteligente capaz de administrar con mayor precisión la cantidad de combustible inyectado y el torque, según la exigencia de las distintas topografías y tipos de carga.
Para comprobar la eficiencia de las innovaciones mencionadas en el tren motriz, la marca sueca realizó un nuevo test drive. Se recorrieron más de 3.000 kilómetros en topografía plana y montañosa con un Volvo FH 460 6×2 Tractor con 52,5 toneladas de peso bruto total combinado.
Con un factor de carga del 100%, se alcanzó un consumo de 35 litros cada 100 kilómetros. Con camión vacío el consumo alcanzado fue de 20 litros cada 100 kilómetros. Con estos valores se puede proyectar un consumo con factor de carga del 50% de 27,5 litros/100km y de 30,5 litros/100km con un factor de carga del 70%.
Comparado con pruebas anteriores, realizadas en el mismo recorrido y con el mismo factor de carga, con la nueva Tecnología de Consumo Inteligente se logró una reducción de consumo de combustible del 6% con carga máxima y un ahorro de hasta 13% en recorridos sin carga.
Tras la presentación fue momento de sentarse en la butaca derecha del Iron Knight y acompañar al piloto sueco Boije Ovebrink, que cuenta con más de 30 años de experiencia en carreras de autos y camiones. Fue una sola vuelta al circuito Nº 5 del autódromo porteño, pero fue suficiente para comprobar la tremenda aceleración de este camión.
Automundo hizo la pole y fue el primer medio en vivir esta experiencia. Tal vez por tuvo el privilegio de aprovechar el entusiasmo de Ovebrink, que ni bien recibió la orden de iniciar la exhibición apretó a fondo el acelerador, algo que se notó en el rugido del impulsor y en el pique de la bestia.
Después de transitar de manera tranquila la primera parte del trazado, Ovebrink volvió a acelerar al Iron Knight cuando ingresó a la recta principal. Ahí la sensación de velocidad duró unos segundos más y se mantuvo hasta que el piloto levantó a mitad de la recta para llegar sin apremios a la primera curva.
A excepción del motor y la caja de cambios I-Shift de doble embrague de serie que constituyen el núcleo del Iron Knight, el resto del camión fue desarrollado por un equipo de expertos de Volvo Trucks que encontró una forma innovadora de fusionar la tecnología con el diseño.
Si bien el equipo técnico trabajó con una cadena cinemática basada en la misma unidad que se instala en los Volvo FH, este vehículo es muy especial porque durante el desarrollo se llevó al límite el motor para ofrecer la máxima potencia.
Con 2.400 CV, 6.000 Nm de par y un peso de 4,5 toneladas, el Iron Knight tiene una relación potencia-peso superior a 0,5 CV/kg. El motor, montado en el centro, es un modelo D13 convencional con modificaciones exteriores para lograr el máximo desempeño. Cuenta dos entradas de aire con filtros abiertos y cuatro turbocompresores, además de tres intercambiadores de calor refrigerados por agua.
La electrónica se ha reducido al mínimo para quitar peso al vehículo. Mientras que el software se ha reprogramado para ofrecer un alto rendimiento. La aerodinámica de la cabina, fabricada en fibra de vidrio, también se ha optimizado. Al igual que las grandes tomas de aire de los faldones que suministran al motor aire refrigerante.
El chasis está diseñado con refuerzos especiales para mantener en línea todos los componentes al suministrar la máxima potencia. Gracias a todas estas modificaciones, el camión especial de Volvo acelera de 0 a 100 km/h en solo 4.6 segundos.