La polémica entre el Automóvil Club Argentino (ACA) y la Asociación Pilotos Automóviles Turismo (APAT) por el uso de la denominación Turismo Nacional ha alcanzado un nuevo nivel de tensión. Tras la decisión del ACA de prohibir a la APAT utilizar ese nombre argumentando que es dueña de la marca, como consta en el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI), el presidente de la APAT, Emanuel Moriatis, respondió con contundencia en una entrevista al programa Máxima Velocidad (Fox Sports).
Con firmeza y tranquilidad, Moriatis dejó en claro que la esencia de la categoría no depende de una denominación oficial, sino de lo que representa en la pista y para sus participantes. “La identidad que tiene la categoría es esto: los 100 autos que tiene en la pista. Ponele el nombre que vos quieras, van a seguir estando siempre…”, afirmó el dirigente durante la presentación de la categoría en el autódromo de Buenos Aires donde corrieron pilotos invitados.
Para Moriatis, el enfoque debe estar puesto en el atractivo que la categoría genera entre pilotos y aficionados, algo que, según él, no se verá afectado por un cambio de nombre. “Hoy tenemos cien autos y 200 pilotos que vienen a correr al Turismo Nacional, al TN, a APAT o como se les ocurra ponerle”, añadió.
Moriatis fue más allá al minimizar el impacto de la prohibición, sugiriendo que el éxito del campeonato que organiza la institución que preside radica en sus características deportivas y no en la disputa legal por un nombre: “La categoría tiene su identidad y mucho no me preocupa… Cero importancia”, sentenció.
UNA LUCHA POR EL CONTROL DEL AUTOMOVILISMO
La medida del ACA de prohibir el uso del nombre Turismo Nacional es un nuevo capítulo en esta disputa que comenzó a fines del 2023 cuando la Asociación Corredores Turismo Carretera decidió romper el acuerdo que tenían las instituciones desde el 2001.
La ACTC, que tenía el poder deportivo delegado por el ACA, optó por volver a ser un ente fiscalizador independiente. Esta decisión fue aprovechada por APAT para dejar la fiscalización del ACA en desacuerdo con su gestión e iniciar una nueva etapa bajo la órbita de la ACTC, como ocurrió entre 1996 y 2001.
A pesar de la contundencia de las declaraciones de Moriatis, el conflicto por el uso de la marca Turismo Nacional no parece tener una resolución cercana. La pregunta que queda en el aire es si el público y los patrocinadores también verán este tema como algo menor, o si la disputa por el nombre podría afectar, aunque sea de manera indirecta, la imagen de la categoría, una de las más representativas del automovilismo argentino.